
Balneario de Paracuellos
Después de pasear por el casco histórico de Calatayud (Zaragoza), visitar sus monumentos y recorrer los senderos del Monasterio de Piedra, no hay nada mejor que recuperarse y descansar en un lugar privilegiado. Ese lugar es el Balneario de Paracuellos. A orillas del río Jiloca con amplias y verdes zonas de paseos y jardines, abrió sus puertas en 1848, convirtiéndose así en el más antiguo de Aragón. Tras su reforma total, hoy aún conserva la esencia del siglo XIX manteniendo el mobiliario de principios de siglo en todas sus instalaciones.
Para recuperar cuerpo y mente y regresar descansados a la rutina del día a día, no hay nada mejor que sumergirnos en las aguas termales de este recinto. Estas aguas sulfatadas tienen propiedades minero-medicinales reconocidas en todo el mundo ya que contienen una gran cantidad de azufre, sulfuro de hidrógeno, calcio, sodio y magnesio, que producen en nuestro cuerpo sensaciones sedantes y tonificadoras.
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