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Baza

El sueño de las piedras

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"Anoche tuve un sueño. Soñé que las paredes de una ciudad me hablaban". Cercano al Ayuntamiento Viejo y al Real Pósito, escuchaba poesía en el interior de su iglesia situada en la monumental Plaza Mayor. Oía el canto dramatizado de las gotas de agua en los baños árabes de la Marzuela, uno de los mejor conservados del país. Al norte de palacios, como el de los Enríquez, se manifestaba de manera narrativa el barrio de San Juan con interesantes muestras de la arquitectura civil y algunas iglesias destacadas (San Juan y, más allá, La Merced). Como punto y seguido, la villa podría ser un cuento al estar rodeada de una naturaleza mágica, casi sobrenatural, que encuentra su punto álgido en el parque natural de la sierra de Baza. Incluso hay tradicionales fiestas, como la de El Cascamorras, que encumbra el arte en la ciudad en la que fue encontrada “la dama”. En definitiva, la moraleja de Baza habla de que no hay fin porque siempre es el origen del más deseado de los sueños.