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Acostumbrados a verle crecer en el papel de chico serio que encarna en la exitosa Cuéntame cómo pasó, sorprende ver a Pablo Rivero en el registro de comedia que nos muestra en Paella Today, una película gamberra y divertida con amores a tres bandas y un concurso de paellas de fondo. Un plato que el actor saborea, especialmente en 'Casa Federico', en Denia, donde ha veraneado desde su más tierna infancia.
Cuando voy me suelo tirar en la playa y no pateo mucho, pero te recomendaría llegar al final del paseo marítimo Les Rotes, en Denia, donde hay un par de restaurantes con un mirador fantástico y con unas vistas espectaculares del Mediterráneo. Pasear al caer la tarde y tomarte algo ahí es un buen plan.
La peli homenajea a la Comunidad Valenciana, al buen tiempo, al comer, al beber... es como viajar un poquito a Valencia. Y lo mejor es que ha sido como disfrutar de unas vacaciones allí, es una ciudad de la que me he enamorado en este rodaje. Hacía tiempo que no volvía a la capital del Turia y la verdad es que si no viviera en Madrid viviría allí. Tienes de todo: la playa muy cerca, el río, el parque que es espectacular, una gran oferta cultural, galerías de arte, cine en versión original, terrazas, un montón de restaurantes baratos en el barrio de Ruzafa, junto al Mercat... Además el rodaje me ha permitido hacer comedia; los que me conocen saben que soy muy ganso y muy payaso, así que me he divertido mucho, ha sido como un premio.
No me pongo mucho, la verdad, pero cuando lo hago me suele salir bien lo que cocino. Suelo cocinar cosas sencillas. Mi fuerte son las ensaladas, que parece algo muy simple pero yo me las curro mucho y me suelen decir que están muy ricas. También hago humus aunque mi plato estrella es el brownie.
Es un plato con el que no me atrevo porque la he comido muy a menudo, ya que he veraneado toda mi vida en la Comunidad Valenciana. Además, mi madre también hace muy buenas paellas que, como los Alcántara, disfrutamos en familia todos los domingos.
Tengo mala memoria para los nombres, pero sí te puedo recomendar 'Casa Federico' (c/ Ausias March, 22), en Denia, donde he ido con mi familia muchos veranos y donde me suelo pedir mi plato favorito: un arroz a banda que está espectacular.
Siempre he sido más de playa pero cada vez me gusta menos el sol, porque tengo la piel muy blanca y corro el riesgo de quemarme. Así que suelo ir por la tarde, cuando el sol no está tan fuerte, por eso mismo cada vez más disfruto de un buen paseo por el campo.
Las Negras de Agua Amarga, en Almería, me encanta.
El Escorial, está muy cerca de Madrid y es muy bonito. Tiene una arquitectura espléndida, una naturaleza maravillosa y se puede comer muy bien. Parece que te has ido muy lejos y, sin embargo, estás al lado de la capital. Un plan perfecto es ir a visitar su Monasterio, comer en algunos de los múltiples sitios que hay por allí y después dar un paseo por el campo.
Hace poco he estado en Menorca y me ha encantado. Cualquiera de sus calas es un paraíso, cala Mitjana es preciosa.
Me gusta todo. Disfruto comiendo lo mismo unos pad thai tailandeses que unos huevos rotos con jamón como los que sirven en 'La Taberna el Sur' (c/ de la Torrecilla del Leal, 12) al lado de la filmoteca, en Madrid. Su tortilla también es espectacular.
'Rómola', en la calle Hermosilla, 4 (Madrid), es un nuevo concepto de restaurante que me gusta porque comes mucho pero no engordas, es todo muy rico y bajo en calorías. Además la decoración también es espectacular. El restaurante '80 Grados' (c/ Manuela Malasaña, 10), muy cerca de donde vivía en Malasaña, también está muy bien. Comes muchas cosas diferentes y todas ricas, como un salmorejo con helado de parmesano riquísimo y una tarta de queso increíble.
Que tenga luz y que las habitaciones sean de un tamaño medio, las que son muy grandes no me gustan. Como he tenido problemas de espalda, el colchón de la cama debe ser bueno y también es imprescindible que las ventanas no dejen pasar la luz de la calle. Este es un fallo que veo en muchos hoteles porque para dormir necesito oscuridad total.
El 'Hotel María Cristina', en San Sebastián. La cama es otro nivel, es grande, alta... como de reina o de rey. Y la fuente de chocolate del bufet es espectacular.
Pues te diría que el que solo con salir ya está contento, soy el que nunca lleva mapa, el que improvisa, al que le encanta que las cosas vayan fluyendo.
Durante muchos años he viajado tanto que cuanto más he salido más me gusta España. Como ahora tengo mucho trabajo me apetece mucho estar en mi casa, me apetece ir a Denia o Cádiz.
Formentera me apetece muchísimo, también a Galicia le tengo muchas ganas.
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