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Baiona

Playas con ecos del nuevo mundo

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Pocas localidades pueden presumir de disponer de un museo flotante. Este es el caso de Baiona y su Museo da Carabela Pinta, una recreación de la embarcación que regresó primero a la Península Ibérica portando noticias del Descubrimiento de América. Y con ello tiene relación la fiesta de la Arribada, donde se conmemora la llegada al puerto de la emblemática nave. Toda la festividad se encuentra aderezada con tiendas medievales, pasacalles, concursos gastronómicos y muchas otras atracciones para el visitante. 
Los amantes del senderismo y la naturaleza tienen en la pontevedresa Baiona su lugar en el ascenso al monte A Groba. Desde allí es todo un placer ver cómo las habituales nubes grises se funden con el azul del Atlántico. Las playas de Baiona son, además, de excelente calidad. En especial la de Ladeira, con tres kilómetros de arena fina y blanca. El municipio dispone también de dos fabulosos monumentos. El primero de ellos es la Virgen de la Roca, con una escalera interior que permite ascender por la estructura y contemplar las inmejorables vistas sobre una de sus manos. Impactan las grandes proporciones de un monumento esculpido en granito, situado en un lugar estratégico. Es una virgen mirador, tan original como sorprendente. Por último, se encuentra la fortaleza de Monterreal. Es una fortificación con más de dos mil años que contiene unas extensiones ajardinadas muy bellas y coloridas, ideales para que el turista pueda dejar la mente en stand by. 

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