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Calaceite

Capital cultural de la comarca del Matarraña

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En el DNI de Calaceite figuran dos anotaciones de sumo interés para cualquier visitante. Es un municipio turolense de Interés-Histórico Artístico ubicado a escasos kilómetros de la linde con Cataluña y en ruta hacia tierras valencianas. Su casco antiguo de trazado medieval, en excepcional estado de conservación, es rico en casas señoriales y ermitas. Como puntos de referencia sobresalen el edificio del Ayuntamiento, la antigua lonja, la iglesia principal o la plaza Mayor. Arcos porticados de diversas estructuras y muy ornamentados coronan los cruces de las calles empedradas que nos encontraremos en Calaceite. La Plaza Mayor es el corazón del pueblo y de ella parten sus tres principales vías. La Casa de la Villa, del siglo XVII, preside con sobriedad y esplendor este recinto. Si seguimos por la calle de la Iglesia llegaremos a Nuestra Señora de la Asunción, la iglesia principal de Calaceite, con una fachada barroca y de grandes columnas salomónicas ubicada entre calles estrechas. Calaceite, además, tiene varias ermitas, como la de Santa Ana, San Roque, San Antonio de Padua o San Cristóbal. Todas se levantan justo encima de las antiguas puertas de la muralla que permitía el acceso al municipio, una curiosa combinación arquitectónica en la que el elemento defensivo es aprovechado para un uso religioso. La producción olivarera del siglo XVIII y comienzos del XIX trajo prosperidad económica a estas tierras. En este periodo se construyeron la mayoría de las casas solariegas que hoy embellecen Calaceite. Son hermosas construcciones de piedra con balconadas y ventanales de forja labrada, con escudos familiares en las fachadas o con portadas con arcos. Le dura la bonanza aceitera al pueblo que hoy tiene reconocida la Denominación de Origen Bajo Aragón. 

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