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Colegiata de Iria Flavia

Padrón, Coruña, A

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La confluencia de los ríos Sar y Ulla, el entorno natural que rodea a la Colegiata de Iria Flavia, lo desarrollaron los romanos y el emperador Tito Flavio concedió al lugar la categoría de municipio y la denominó Iria Flavia, antigua ubicación administrativa de Padrón y puerto de gran importancia. Almanzor derribó la primera iglesia cristiana en el s. X. Las lluvias y la riqueza de las tierras devolvieron un nuevo templo en tiempos del arzobispo Gelmírez allá por el siglo XII y sobre dichos cimientos, reconstruidos en el s. XVII por otro arzobispo, el de Monroi, lucen la portada con arcos apuntados sobre columnas y sus torres escalonadas, con su peculiar estilo ojival romano. 

Antes de adentrarnos en el templo por su escalinata hemos pasado por el centenario olivo cuya sombra siempre acompaña a los restos mortales del premio Nobel de Literatura, Camilo José Cela, pues la colegiata se encuentra muy cerca de la fundación del ilustre escritor. Como una inspiración, la luz de las vidrieras sosiega a las almas inquietas, que son recibidas por una Adoración de los Reyes Magos en el tímpano de la entrada. Capillas fueron añadidas al sur, como la de del Obispo de Quito, y al norte, como la del Sagrario, dedicada ésta a la Virgen de Belén. Y el reposo eterno en el interior de sus muros, en sus inmediaciones, acompaña sin mediar palabra a los sepulcros, a las lápidas de 28 obispos allí enterrados además de albergar objetos varios, porque el atrio es a su vez cementerio, el de Iria o Santa María de Adina como también es conocida la excolegiata que ya recordara en sus poemas la padronesa Rosalía de Castro.

Contacto

Localización

Iria Flavia , Padrón, 15917