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Playa de Arou

Camariñas, Coruña, A

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Estoy haciendo marcha por el paseo marítimo de suelo gris que bordea esta playa con forma de ensenada. De pronto, mis ojos se han desviado por una de sus rampas de acceso. Allí está ella, silueteada por piedras marrones. Muchos adultos descansan sin preocupaciones sobre su arena blanca como si no se encontrasen tan cerca de los bravos acantilados de la Costa da Morte mientras que sus peques corretean por la zona infantil o se bañan en las tranquilas aguas jugando con las escasas olas. Algunas familias se dirigen al aparcamiento y una pareja ayuda a un señor en silla de ruedas por el acceso para personas con movilidad reducida. Para no seguir distrayéndome con esta pequeña oda a la tranquilidad, vuelvo a mirar el paseo marítimo: cerca tengo las peculiares construcciones de piedra con tejados a dos aguas del pueblo; lejos, las picudas montañas entre la bruma; enfrente, las islas Lobeiras, hogar del alabado percebe local. Ya falta menos para recorrer los 15 km que me separan del Puerto Deportivo de Camariñas.