{{title}}
{{buttonText}}

Ermita de Santa Ana

Alameda del Valle, Madrid

Compartir

Solo la espectacularidad de las vistas que se obtienen del valle del Lozoya y del pico de Peñalara ya merecerían el camino hasta aquí. Pero, además, la ermita es de una belleza deslumbrante, de esas que hace juego con el paisaje y no sabes si te parece tan bonita por el lugar en el que está o es éste el que te ha encantado porque contiene el maravilloso templo. En el caso de la ermita de Santa Ana, no se entienden el uno sin el otro. Sus sillares de piedra y ladrillos le dan un aspecto románico que por época, s. XVIII, no le corresponde. Quién sabe si esa sobriedad buscaba hacer juego con la talla de la santa, de los siglos XI al XIII, que se guardaba en su interior hasta que hace algunos años se trasladó hasta la iglesia de Santa Marina y que ahora visita su antiguo hogar en romería cada mes de julio. Sentados en los bancos que rodean la ermita y permiten las extraordinarias vistas, no hay que olvidarse de echar una ojeada a la pequeña espadaña lateral, casi el único adorno del templo, junto con el alero de madera.

Contacto

Localización

40.893336, -3.836471