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¿Hay algo mejor que satisfacer dos antojos al mismo tiempo: el de un paisaje bonito y el de los paladares más exquisitos? No se nos ocurre nada, así que te dejamos algunas sugerencias para que disfrutes de un agradable paseo por la ciudad. Descubre 7 miradores para ver Lisboa en todo su esplendor.
Por usar una palabra que aparece a menudo en las guías de viaje y productos similares, utilizada sobre todo por quienes desconocen los lugares sobre los que escriben, digamos que Graça es pintoresca. Vayamos aún más lejos: es castiza. Lo curioso es que, al ser uno de los barrios más altos de Lisboa, en la cima de una colina con vistas a la ciudad, está lleno de miradores. Los dos más conocidos son los miradores de Senhora do Monte y Miradouro da Graça. ¿Pueden estar abarrotados de turistas? Por supuesto, como todos los lugares desde los que sacar fotos bonitas de cualquier capital. ¿Vale la pena? Desde luego. No lo dudes.
El mirador de Senhora do Monte tiene una vista panorámica que va desde la desembocadura del Tajo hasta Avenidas Novas.
Y ya que estás ahí, dos consejos. Cerca del Miradouro da Graça, visita O Satélite, una de las mejores tabernas clásicas que siguen en pie, perfecta para perderse entre una fabada o un bacalao. En la zona de Senhora do Monte, tienes que probar el bitoque de Cardoso do Estrela D’Ouro al menos una vez en la vida. Si después tienes dudas sobre qué te ha gustado más, si las vistas o la comida, significa que todo ha salido a pedir de boca.
O Satélite. Largo da Graça, 42; De martes a domingo, de 9:00 a 22:30; Teléfono: 218 862 679
Cardoso do Estrela D’Ouro. Rua da Graça, 22; De 12:00 a 15:00 y de 18:30 a 21:00, cerrado los domingos (sábados solo comidas); Teléfono: 218 865 230
Sirve de escenario para mercados de productos en los que suelen comprar los turistas. Es escenario de fiestas, las que tienen música y copas y las que se celebran después de la música y las copas. Se pueden ver los tuctucs pararse allí, incluso donde supuestamente no pueden, para que los pasajeros corran a compartir una imagen en redes sociales. Estos "pecados" se ven a diario, pero São Pedro de Alcântara sigue teniendo un efecto hipnótico nada más verlo, con la Avenida da Liberdade y los Restauradores a nuestros pies, toda una ciudad que desemboca inevitablemente en el Tajo.
Desde el mirador de São Pedro de Alcântara se divisa el Castelo de São Jorge, Graça y el río Tajo.
Una curiosa encrucijada de calles y callejones insiste en fascinarnos. Se trata de dejarse guiar por las emociones a lo largo del camino que da nombre al mirador de Lisboa y elegir uno de los dos mundos que te esperan justo debajo: el refinamiento y la exclusividad audaz de 100 Maneiras (1 Sol Guía Repsol 2025) de Ljubomir Stanisic; o dar unos pasos más hasta Carmo para intentar conseguir mesa en el abarrotado, pero más que bonito, Super Mário, que los martes sirve Cozido à Portuguesa para comer hasta que se agote.
100 Maneiras. Largo da Trindade, 9; Todos los días de 18:30 a 02:00, almuerzos los fines de semana de 12:00 a 15:00. Teléfono: 910 307 575
Super Mário. Rua do Duque, 9; De lunes a sábado, de 12:00 a 16:00 (cerrado los domingos); Teléfono: 213 479 437
Pasamos por allí y ya no queremos volver a trabajar. Tal vez mañana, quién sabe. Ya no queremos que sea por la mañana, quedémonos en este crepúsculo del final de la tarde, el comienzo de todo lo que pueda suceder después. Largo das Portas do Sol es una especie de diván sobre Alfama, un plano inclinado en el que nos acostamos a existir, sin alarmas ni sorpresas, como una forma particular de terapia.
Desde Largo das Portas do Sol se ve Lisboa y la orilla sur del Tajo, desde Barreiro hasta Seixal.
Este es el nivel de satisfacción que el mirador, por muy abarrotado que esté, garantiza a quienes le dedican tiempo. Incluso en situaciones en las que podemos ver uno o dos cruceros en segundo plano. Tiene gracia, parecen pequeños. Pero más gracia tiene cualquiera de las mesas donde te pueden atender. ¿Buscas algo informal, nada gourmet, pero siempre con atención al detalle? Esperança da Sé, justo al lado. ¿Algo más nocturno, más selecto, más caro y con un toque fadista? La mesa de los frailes, entonces. ¿Un bitoque, una copa, otra y mucha charla? O Sardinha te espera, ¡vamos!
Esperança da Sé. Rua São João da Praça, 103; Todos los días de 19:30 a 01:00, almuerzos de fin de semana de 13:00 a 16:00; Teléfono: 218 870 189
Mesa de Frades. Rua dos Remédios, 139; Todos los días de 18:30 a 21:00 y de 21:30 a 02:00; Teléfono: 917 029 436
O Sardinha. Rua do Jardim do Tabaco, 18-20; De domingo a viernes de 12:00 a 22:00; Teléfono: 218 867 437
El camino para llegar ya indica que se avecina algo especial. Porque no es la ruta más predecible. Viniendo de la Calçada de Sant'Ana, es como conquistar la más difícil de las subidas; desde el Campo dos Mártires da Pátria, hay que cruzar la calle rodeada de palacetes que hacen que el turista se pregunte: "¿dónde he acabado?"; o bien, subir hasta Lavra, en ascensor, claro, que a pie nadie se lo merece.
Jardim do Torel es uno de los miradores más escondidos de Lisboa.
En el Jardim do Torel te sientes como en casa de alguien, siempre esperando que vengan y te digan que aquello es un lugar privado. Pero no lo es. Es un mirador perfecto para los padres que pasean con sus hijos hacia el parque infantil. O para los hipsters, que encuentran en él un sitio seguro. Incluso los turistas que se acercan quedan fascinados. Tendrás hambre y puedes saciarla mientras disfrutas de las vistas. Ya nos lo agradecerás. Primero siéntate en una mesa de la Esplanada do Torel Palace, que, a pesar de ser un hotel, comparte su sofisticación con quienes acuden a la hora de comer. Consejo: sirven un menú ejecutivo al mediodía, así que tenlo en cuenta.
Black Pavillion Torel Palace. Rua Câmara Pestana, 45; Todos los días, de 12:30 a 15:00 y de 19:30 a 22:30; Teléfono: 218 099 132
Una primera pregunta muy lógica cuando hablamos de Fifty Seconds (2 Soles Guía Repsol 2025) es si te da miedo subir en ascensor. En caso afirmativo, este es el mejor momento para intentar superar tu fobia. El nombre está relacionado con el concepto del espacio donde tiene lugar la experiencia: en lo alto de la Torre Vasco da Gama, a 120 metros de altura (la torre tiene 25 más, pero no son accesibles para los comensales), tras un viaje en ascensor de 50 segundos.
En el Parque das Nações, además de la Torre Vasco da Gama, se puede ver Lisboa desde arriba en un paseo en teleférico.
¿Y qué pasa ahí arriba? Hay unas vistas de Lisboa hacia poniente y el estuario del Tajo justo enfrente (si suena a poesía, espera a verlo con tus propios ojos). Esto se suma al arte del equipo que lidera el chef Rui Silvestre, en una carta de pocos meses, con curry de cabarineros, ajo negro y limón confitado, atún rojo, caviar oscietra con wasabi y coliflor o erizo de mar, caldo de cebolla caramelizada y caviar de oro imperial. La idea es buscar un paladar infinito, con menús de 11, 12 o 14 platos (entre 195 y 235 euros). Quien tenga miedo de subirse en ascensor, que avise.
50 Seconds. Rua Cais das Naus, 2.21.01; De martes a sábado de 19:00 a 22:00, almuerzo los sábados de 12:30 a 14:00; Teléfono: 211 525 380
Sería difícil encontrar una alternativa mejor para aquellos que tienen miedo a subir en ascensor. Atira-te ao Rio tiene nombre de sugerencia complicada y poco recomendable, pero lo único que lanzarás desde esta terraza es un gran suspiro y, sin duda, muchas fotos. En la Rua do Ginjal, en Almada, te espera una de las mejores combinaciones que ofrece "el otro lado": el perfil de Lisboa y una carta muy sugerente.
Algunos dicen que la mejor vista de la capital es desde el otro lado del río, y nosotros estamos de acuerdo.
Imagina un horizonte formado por la elegante línea que va desde Terreiro do Paço hasta Belém (y no se detiene ahí), acompañado de -y aquí te dejamos solo algunos ejemplos- ensalada con pulpo a la parrilla o gambas al ajillo, risotto de gambas con lima y cilantro o pulpo al lagareiro con patatas asadas, filete o magret de pato, un súper clásico como el arroz dulce o tarta vasca. La gran pregunta es si querrás irte cuando termines de comer o si querrás prolongar tu estancia solo para no tener que despedirte del paisaje. Tú decides.
Atira-te ao Rio. Rua do Ginjal, 69; Todos los días de 12:30 a 16:30 y de 19:00 a 22:30; Teléfono: 212 751 380
Hay quienes dicen que cuanto mayor es la subida, mayor es la caída. Aunque esa afirmación es cierta en algunos aspectos de la vida, esta es la excepción que podría confirmar la regla ya que el dicho no podría estar más lejos de la realidad. El Castelo de São Jorge es uno de los monumentos de Lisboa que llena fotos, redes sociales, postales e incluso sirve como objetivo para los paseos de los que desconocen por completo las calles empinadas que conducen a él.
Desde el Castelo de São Jorge se puede ver la ciudad desde el río hasta Avenidas Novas.
Tanto para los que encuentran el camino como para los que se pierden, hay un oasis seguro en la ruta. Se llama Chapitô à Mesa y es el restaurante y terraza de la escuela de circo del mismo nombre (una de las instituciones de educación artística más populares de la capital y alrededores). La vista a techo descubierto se complementa con un restaurante panorámico en la primera planta. Elige entre arroz con pato, cerdo alentejano o lubina a la parrilla. También puedes optar por el steak tartar o las empanadillas tiernas de cangrejo, bacalao Conde da Guarda o las famosas carrilleras. Roza lo acrobático.
Chapitô à Mesa. Costa do Castelo, 7; Todos los días de 12:00 a 01:00; Teléfono: 218 875 077
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