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La Zubia

Sensaciones en la mirada

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Una mirada en La Zubia vale más que mil palabras. Cada persona observa de manera diferente. Por ejemplo, Isabel la Católica escogió el entorno de San Luis para admirar la belleza de la Vega de Granada con la Alhambra como telón de fondo. Reconoció el prodigio de la arquitectura árabe en el lugar donde hoy se encuentra la iglesia de San Luis, el palacio arzobispal y el jardín romántico del Laurel de la Reina. A través de los ojos del cantero Ambrosio de Vico sentimos la pasión por los tesoros que alberga la iglesia gótico-mudejar de la Asunción. La cúpula, la torre o el retablo son algunas de sus maravillas. Por otro lado, si Félix Rodríguez de la Fuente hubiera visitado La Zubia, habría captado con su cámara grandes momentos de protagonismo natural. La toma mostraría a las cabras montesas surcando el parque natural de Sierra Nevada. El verde también es protagonista en el parque de la Encina donde brota un árbol centenario. Un viajero no solo observa; también saborea platos tradicionales como las migas o el conejo al ajillo y siente las fiestas de San Juan de Nepomuceno. La Zubia significa retiro. Por tanto, es el lugar perfecto donde descansar la mirada.