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Dehesa de Navalcarbón

Las Rozas de Madrid, Madrid

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A escasos tres kilómetros de La Rozas se encuentra su pulmón, un pequeño paraíso de transparentes canales de agua; vegetación de encinas, enebros y un frondoso pinar cuyos árboles regalan sus piñones. Los vecinos también le llaman “Pinar de las Rozas” por la abundancia de estos árboles. Generalmente se visita para el deporte y el ocio ya que tiene zonas de “columpios” y áreas donde se pueden “montar” picnics. Además, acoge un pedazo de tierra, reducido, pero de gran importancia en el ámbito militar debido a sus más de diez fortines de piedra y hormigón provenientes de la Guerra Civil. En dicho espacio se conservan igualmente huellas de atrincheramientos, fusiles y ametralladoras, refugios para soldados y civiles e, incluso, depósitos de alimento. Toda una fuente de conocimiento tanto histórico como arqueológico. Para visitar como es debido tanto el parque como los Fortines, existe una Ruta municipal para ciclistas, runners y caminantes: el Sendero LR-9.

Localización

Travesía de Navalcarbón, 61B 28232 Las Rozas, Madrid