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Vino en pareja.

Vinos para tomar en pareja

El complemento perfecto para una cena

Actualizado: 25/11/2015

Nos gustan las personas que no esperan a ocasiones marcadas en el calendario para tener un detalle con su pareja (también valen los amigos). Apuesta por coleccionar momentos, no cosas materiales. Y qué mejor momento que el que se vive desconectando los móviles, apagando la tele y descorchando una botella. Además de aumentar los niveles de serotonina, el vino influye de manera positiva en nuestro estado de bienestar. Como sabemos que la compañía ya la has elegido, nosotros nos ocupamos de recomendarte cuál elegir.

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1. Ourive (Ronsel do Sil)

Un blanco 100% godello, de la Denominación de Origen Ribeira Sacra (Galicia). Para el sumiller: “Es un vino de una producción limitada, elaborado con mimo, del que se hacen pocas botellas. Además, nos podría transportar a la Ribeira Sacra, una zona bonita y romántica”.

2. Nocturna (Oxer Wines)

Ya el nombre invita a una noche solo para dos. Nocturna es un tempranillo elaborado en Laguardia con Denominación de Origen Calificada Rioja, criado en barrica de roble francés y del que solo se producen 15.000 botellas. Armoniza perfectamente con embutidos, carnes, arroces o verduras.

3. Glaç Rosé (María Casanova)

Si se trata de espumosos, Glaç (D.O. Cava), que María Casanova, una pequeña bodega, elabora con pinot noir, xarel.lo, macabeo y perellada. Para el día de San Valentín, mejor el Glaç Rosé, fresco, agradable y más apropiado para una cena romántica.

4. Rioja Bordón Gran Reserva

Su mezcla de fruta y madera en boca le proporcionan a este tinto, un rioja de los más elegantes, el toque ideal para las celebraciones íntimas. Se elabora con tempranillo, garnacha y mazuelo, con una crianza de 24 meses en barricas de roble americano.

5. Gran Caus (Can Ràfols del Caus)

Hablando de rosados, Gran Caus, de bodegas Can Ràfols del Caus, un vino catalán 100% merlot en cuyo cultivo, explican desde la marca, no se han usado insecticidas ni herbicidas.

6. Sacristía aB

Para cerrar, nuestros siempre únicos vinos de Jerez. David Robledo, quien se declara “gran apasionado”, nos dice: “Tomaría una Manzanilla en rama sacristía AB, fresquita, en el aperitivo y un PX de Emilio Hidalgo para terminar la velada (sobre todo si hay postres a base de chocolate)”.

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