Mansilla de las Mulas
Historia romana
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En Mansilla de las Mullas se respira un aire especial. Quizás sea porque esta villa leonesa lleva sus orígenes romanos grabados a fuego, con una muralla, declarada bien de interés cultural, impresionante. O sus espectaculares puertas; la del castillo, ubicada en la zona sureste y entrada al Camino de Santiago; y la de la Concepción y la del Postigo, que empapan a Mansilla de su pasado y parecen teletransportarte al mismo. El museo Etnográfico es otro de sus puntos fuertes. El puente romano y las iglesias de San Martín, actual Casa de la Cultura, o la de Santa María, el primer edificio religioso del pueblo, son otros emplazamientos dignos de destacar por su belleza arquitectónica. Formada por las pedanías de Villomar y Mansilla del Esla, este municipio puede presumir de albergar una de las fiestas por excelencia de la vertiente cantábrica: la Feria del Tomate, en la que se incluye la popular y divertidísima tomatina, y el Día del Asturiano; en honor a los muchísimos visitantes venidos desde la provincia del Principado. La mayoría de ellos decide alargar sus vacaciones para disfrutar, el segundo domingo de septiembre, de las fiestas patronales de Mansilla; un lugar que no conoce la palabra aburrimiento.
Localización