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Ramirás

Ramirás, naturaleza en el Arnoia, majestuosidad en San Pedro

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Pegado a Celanova, cabeza comarcal, y creado en 1926 de la fusión de Freás de Eiras y Vilameá de Ramirás, O Picouto, al borde de la OU-531 que comunica Celanova con Cortegada, alberga la capital municipal desde 2005. Desde allí, nada mejor que acercarse hasta el mirador natural que alberga la ermita de San Paio dos Pitos, a 730 metros de altitud, donde cada 26 de julio se celebra una romería con fiesta campestre incluida en el área recreativa, para contemplar una panorámica de este ayuntamiento y de buena parte de la comarca.

De allí parte un interesante camino de montaña, que asciende por las laderas en las que nace el regato Abelairo, pasando por A poza do circo y A pisada da mula, hasta alcanzar la cueva natural del Coto da Moura, a 944 metros. Otra ruta pasa por el área recreativa de A Pontenova, con playa fluvial en el Arnoia, y permite recorrer el espectacular cauce del río (el más largo de la provincia con 84,5 kilómetros) entre robles, castaños y abedules hasta el vecino Cartelle. Ambas rutas sirven para disfrutar de las bondades paisajísticas de este concello orensano con poco más de 1.500 habitantes.

Impresiona acercarse a lo que se conserva del histórico monasterio de San Pedro de Ramirás, con sus orígenes en el lejano siglo XI: aparece documentada la existencia de una comunidad mixta en 1017, después de monjas benedictinas y, ya en el siglo XX, otra de clarisas procedentes de Allariz. Lo que queda es la monumental iglesia medieval de estilo predominantemente románico con retoques góticos, de planta basilical con tres naves separadas por columnas y tres ábsides semicirculares con ventanas, que le dan un aspecto majestuoso. Sobresalen el rosetón de la fachada, las dos puertas con columnas y arquivoltas, los contrafuertes y la hilera de canecillos por todo el perímetro. Como contrapunto, pegado al templo, el solar otrora ocupado por el cenobio alberga ahora una moderna residencia.

Al otro lado del río Tuño, con la fachada mirando para San Pedro de Ramirás, está la iglesia de Paizás, con el escudo del monasterio benedictino de San Salvador de Celanova, al que pertenecía, en un lateral. En la parroquia de Rubiás, la más montañosa del ayuntamiento, la iglesia parroquial conserva un destacado retablo barroco, una gran pila bautismal y un confesionario rococó. Por su parte, la iglesia de San Andrés de Villavidal, de estilo barroco, destaca por sus pináculos piramidales rematados con acróteras.