
Establecimientos gastrónomicos más buscados
Lugares de interés más visitados
Lo sentimos, no hay resultados para tu búsqueda. ¡Prueba otra vez!
Añadir evento al calendario
Con su tercer álbum recién salido del horno, T'estimo es te quiero, Alfred García se ha consolidado como uno de los artistas jóvenes más destacados del panorama musical. Un disco en el que rinde homenaje a la rumba catalana y en el que profundiza en la composición en su lengua materna, rindiendo culto a su tierra también en el plano audiovisual con videoclips en los que el Mediterráneo es tan protagonista como la propia canción. Charlamos con él para conocer cómo alimenta su creatividad a través de sus viajes y giras, y cómo esa pasión por descubrir se traslada también al ámbito gastronómico.
Bueno, mi familia paterna es valenciana, entonces, ya con eso empezamos, porque, claro, las paellas de mi abuela y de mi tía Elena eran unos platos superlativos. O sea, eran mejores que cualquier paella que te puedas comer en la mejor arrocería del mundo. Yo me he criado con la paella tradicional valenciana hecha por dos abuelas valencianas.
Sí, sí, sí. Cuando eres valenciano o valenciana, sabes cómo hacer una paella, y lo consigues.
Me gusta cocinar y, además, me gusta mucho hacer las cosas a mi manera. A mí me enseñó a cocinar Albert Plá, que es un gran cocinero. Me enseñó a cocinar Albert durante muchos años. Me dio clases de cocina.
Me enseñó a hacer desde una tortilla hasta hacer croquetas, a cocinar al horno pasando por hacer cosas en una Thermomix. Vamos, me hizo todo un cocinillas. Además, me enseñó algunas cosas que cocinamos con aceite y que él las cocinaba sin aceite, que era una cosa que me quedé muy sorprendido. Por ejemplo, el pescado, que se puede cocinar sin echarle aceite ni nada, es una cosa que yo no concebía, que siempre había visto hacer en mi casa con aceite. Entonces, pues, no sé, hasta cosas con chocolate o cocinar a la leña. Muchas cosas, pero cosas que he aprendido viendo porque él es un gran cocinero.
Algo que se me podría dar muy bien y podría sorprender es con un arroz chaufa, que es un plato que se hace en Perú. Y mis tortillas francesas son curiosas porque yo hago una cosa que es un poco curiosa: subo el fuego mucho, tiro los huevos, apago el fuego y dejo que se haga la tortilla sin estar el fuego encendido. Comolo he puesto muy a tope, entonces, le doy la vuelta por dentro y no se ha acabado de hacer y queda poco hecha. A veces, incluso, si me da la gula, le echo jamón y la cierro y pa' dentro. Cantoneada y perfecta, buenísima.
Yo he vivido toda mi vida en la playa, prácticamente delante. Pero he estado un tiempo viviendo también en la montaña, en medio del bosque, en una masía, y allí disfrutas mucho. Hablando de gastronomía, disfrutas diferente, cocinando un poco a la leña, disfrutando en otoño de lo que te da el bosque también, de las setas, de los espárragos trigueros… Yo lo disfruto todo, en general. La naturaleza me gusta mucho, la verdad. Cada sitio te da tu cosa. Pero en el Prat lo que más me gusta es la parte del río que te lleva al mar. La desembocadura del río que te lleva hacia la playa es algo mágico porque se juntan dos aguas, como la canción de Paco de Lucía, Entre dos aguas.
Yo tengo vídeos de cuando tenía un año en la playa, en los caminos del delta con mi padre. Me acuerdo que cogíamos el coche y nos íbamos a dar una vuelta por ahí. Con mi madre, hemos ido siempre a la playa en verano, pero también en primavera, cuando aún no hay nadie. Me acuerdo de ir con mis colegas a construir cabañas en el delta de Llobregat. He rodado muchos videoclips allí durante toda mi vida.
Es decir, eso es mi vida. Por eso hablo sobre la ampliación del aeropuerto. Es una cuestión totalmente humana y humanista. De decir: Ostras, pero yo tengo todos estos recuerdos y también quiero que los vivan mis hijos, si tengo algún día. O mis primos pequeños o mis sobrinos. Por eso para mí es muy importante. No queremos que desaparezcan nuestras tradiciones, queremos vivir sosteniblemente pero, a la vez, nos queremos cargar algo por 400 metros más de pista para los aviones.
Recuerdo con gran cariño, que además lo nombro en mi canción Estrella con Álvaro Soler, Estartit y el río Ter. Fuimos de colonias hace unos cuantos años a una masía delante de la playa del Estartit, con el río Ter al lado, que es como estar en mi zona, porque también es el río, la desembocadura y la playa, y me acuerdo que era tan hippie aquello. Igual tenía ocho o nueve años, te despertabas por la mañana y te tirabas al agua, y esa sensación de estar dormido y tirarte directamente al mar y despertarte de golpe… O irte a hacer windsurf en el río… Era increíble.
Te pasabas el día en el agua y tengo un gran recuerdo de esas colonias de todos esos años con mis amigos del colegio… Que eran las primeras veces de todo, ¿sabes? Que te empezaba a gustar una chica y entonces te abrazaba y ya que te abrazase era como te explotaba la cabeza; un colega traía un cigarrillo que le había robado a su madre y todos estábamos como: ¡Guau! ¡Qué fuerte!; uno te pedía gomina y el otro te pedía que lo peinases como tú te peinas…
Las vistas de las islas desde la Gola del Ter. Foto: Miguel Cuesta
También recuerdo mucho cómo olían esos comedores, esas cocinas de las casas de las masías, de las casas de colonias, que tenía un olor muy particular y siempre era menú infantil pero estaba muy bueno. Cataluña tiene mucho eso, todo lo tradicional y todos los menús infantiles están como muy cuidados
Bueno, Dua Lipa tiene un presupuesto para estar cuatro días antes del concierto en la ciudad (bromea). Pero yo he gozado también de esa suerte de poder estar un día antes o quedarme un día después en la ciudad y poder comer bien.
Comer en gira es algo que me ha traído más problemas de lo que te puedas imaginar. Porque uno normalmente come en la carretera y, ciertamente, hay sitios muy buenos en carretera que hacen muy buena comida. De hecho, solo tengo buenos recuerdos de esos sitios.
En restaurantes como 'Las Bairetas', Solete de carretera valenciano, bordan cada plato. Foto: Eva Máñez
Lo que pasa es que yo en ese momento no tenía tanta información sobre lo saludable que es comer bien y lo qué significa. En las giras que he hecho estás más nervioso de lo normal entonces comes más y hasta hace unos años yo no empecé a comer de manera sostenible. Se habla de la sostenibilidad de muchas cosas, pero en la comida también hay que ser sostenible a la hora de comer y, bueno, fue un problema en un momento dado. El comer fuera de casa y comer a deshora o comer tarde o comer mucho.
A lo largo de todos estos años, por darle el punto positivo, me gustaría remarcar eso porque es algo que nunca había contado yo y creo que es un momento ideal. Hay que comer de manera sostenible.
Recuerdo con gran cariño cuando fuimos a comer a 'Karlos Arguiñano' (Recomendado por Guía Repsol), en Zarautz, fue increíble. Recuerdo el 'Totora' de Barcelona, antes de que cerrase...
Buenos Aires, en Argentina, fue el único país de Latinoamérica que hicimos, entonces vino gente de Perú, de México, de Paraguay, de Chile, de Cuba… Vinieron desde toda Latinoamérica. Fue muy sorprendente ver que en todos esos países se me conocía.
Últimamente estoy descubriendo mucho las Canarias. He descubierto en dos grandes ocasiones Las Palmas. Ya había ido a actuar allí, pero recientemente me dieron un premio en Las Palmas de Gran Canaria y me trataron con una hospitalidad increíble. Y por otro lado, Pedro Guerra hace unas semanas me invitó a cantar al mejor auditorio del mundo, siempre lo digo porque tiene unas vistas increíbles al mar, que es el Auditorio Alfredo Krauss.
Caminando por Las Palmas se descubren lugares tan sorprendentes como la catedral de Santa Ana. Foto:Hugo Palotto
La gente de Las Palmas es superacogedora, superhumilde y superamable. Siempre es todo corazón y es un lugar que me gustaría descubrir más y mira que desde hace un tiempo voy a las Canarias a pasar fin de año y Navidades. Me voy o a Fuerteventura o a Lanzarote. Me encanta, además, también tiene una riqueza gastronómica increíble.
Me gusta estar tranquilo, de hecho, yo ya voy a un hotel donde no salgo del hotel porque es está en medio de la naturaleza, no hay nadie.
Pueblos como Beget son de los más desconocidos y atractivos del interior catalán. Foto: Flaminia Pelazzi
Yo creo que el interior de Cataluña. No está nada valorado, ni siquiera se conoce. Hay muchos sitios escondidos por el interior y por el norte de Cataluña, sobre todo por los Pirineos. Hay sitios increíbles.
En general... ¿cómo valorarías la web de Guía Repsol?
Dinos qué opinas para poder mejorar tu experiencia
¡Gracias por tu ayuda!
La tendremos en cuenta para hacer de Guía Repsol un lugar por el que querrás brindar. ¡Chin, chin!