{{title}}
{{buttonText}}

Fuente Grande o Fuente Nueva

Ocaña, Toledo

Compartir

Parece una pequeña ciudad imperial más que una fuente. Una colosal obra de ingeniería hidraúlica que perfila el renacimiento en la arquitectura. Venir hasta aquí es encontrarse con una ciudad de medio millar de metros en galerías, muros y canales que desafían cualquier elemento de conducción de agua moderno. Es posible, con el peso de la imaginación, atisbar a las 300 mujeres que en el siglo XVI llegaban cada día a los lavaderos de esta especie de Pompeya en medio de Ocaña. Se cree que entre los pilones que se extienden aquí como enormes tumbas, pudo haber delimitado un espacio destinado al lavado de los enfermos y difuntos. Pero hay cosas, como esta, que Fuente Nueva se lleva con ella; como si sus secretos y misterios se los hubiera regalado al viento, como las veintidós hornacinas cuya función también se desconoce. Más de tres mil metros cuadrados esconden la “ciudad del agua”, el santo grial de estilo herreriano que, a día de hoy, sigue callando los misterios de su pasado.

Localización

39.96233209776424,-3.5007119178771973