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Para ser vanguardista hay que tener muy presente lo antiguo y eso lo saben muy bien en 'Ábbatte', una empresa centrada en la moda y la ropa de casa cuyas bases de operaciones son una tienda en Madrid (concretamente en la calle Villanueva, 27) y un particular espacio situado junto al Monasterio de Santa María de la Sierra, en Segovia, donde se fabrican de forma tradicional todos sus artículos.
En el origen del proyecto está Elena Goded Rambaud, bióloga y Doctora en Educación que se ha dedicado, durante 25 años, a impartir cursos para profesores de artesanía textil. "Desde hace años, tenía en mente la idea de desarrollar de forma práctica lo que había acumulado durante mi etapa didáctica –comenta Elena–. Las ruinas del Monasterio de Santa María de la Sierra aparecieron en mi vida y pensé que era el mejor lugar del mundo para construir un taller".
En la ladera norte de la Sierra de Guadarrama, en la linde de un robledal y un pinar, se encuentra este Monasterio construido en el siglo XIII durante la transición del Románico al Gótico. El proceso de desamortización del siglo XIX y el progresivo abandono del lugar lo convirtieron en una ruina… hasta que llegó Elena con la idea de integrar los vestigios a una nave moderna donde se desarrollan las principales acciones de este centro textil.
Claro que en esta aventura no está sola, le acompaña su hija Camila Lanzas, historiadora del arte y diseñadora, que asumió la labor de creación de producto. "Otra parte importante de 'Ábbatte' lo forman el equipo de tejedoras que se prepararon específicamente para trabajar aquí. Todas ellas mujeres de la zona cercana al Monasterio", continúa la emprendedora.
Alfombras, almohadones, mantas o manteles para casa y chales o bufandas para él y ella son algunos de los artículos que producen. Todos ellos tejidos con fibras naturales de máxima calidad. "Seda, cashmere, lana de origen español (tejida a mano en el taller, por cierto) y lino. Hay fibras que proceden de otros países como la alpaca, que viene de Perú y Chile, donde tiñen en plantas andinas que dan como resultado unos colores únicos".
Y es que el tintado de las hilaturas es una etapa del proceso que en 'Ábbatte' cuidan con esmero ya que cuentan con un jardín donde cultivan plantas usadas para el coloreado de tejidos. "El fin del cultivo de estas plantas es la difusión de un uso botánico muy concreto, extraer tintes para fibras textiles –describe Elena–.
Actualmente tenemos 160 especies vegetales y cultivamos la Rubia Tinctorum de manera muy especial". El color rojizo de la raíz de esta planta originaria de la zona mediterránea ha sido utilizado desde el Antiguo Egipto. "Recuperar el cultivo de la Rubia Tinctorum, con antigua tradición en Segovia para su uso y comercio, era uno de los objetivos del proyecto".
El proceso es laborioso pero gratificante. "Los tintes se extraen según cada planta de diferentes partes, una puede ser la raíz, el tallo o las flores. Una vez exprimida, se realiza la cocción de una hora de la parte de la planta seleccionada. Realizada esta tintuta, se sumerge el materia textil en el líquido y, en muchos casos, se ayuda a fijar el color con diferentes métodos".
El espacio de Segovia no solo consta de la factoría donde están los telares manuales y desde donde sale a la calle su exquisito género, también hay otro espacio ("al que denominamos estancia", puntualiza Elena) donde se lleva a cabo su parte cultural con la celebración de seminarios, conferencias y múltiples cursos: desde cestería hasta sombrerería.
"Las instalaciones situadas en el Monasterio de Santa María de la Sierra se han convertido en un verdadero centro textil y de referencia para muchos profesionales del sector. Para 'Ábbatte', el aspecto cultural es una parte importante, forma parte de su esencia". Incluso, cuentan con una colección de trajes históricos de pequeño tamaño que se han ido confeccionando de manera divulgativa.
Mientras que la parte segoviana de 'Ábbatte' es un hervidero de conocimiento, la tienda madrileña se ha convertido en un referente de la nueva artesanía española. "Todo lo que se teje en los talleres del Monasterio se manda a la tienda de Madrid, excepto algunas piezas que se quedan allí para su venta directa. En realidad, las dos instalaciones forman una sola unidad ya que estamos en continua comunicación y, de hecho, parte del equipo trabaja tanto en un sitio como en otro", asegura Elena.
En la tienda de Madrid se pueden encontrar desde pequeñas cosas para niños como capotas, mantitas de lana merina o saquitos para el coche, hasta mantelerías grandes, plaids de alpaca y terciopelo, cabeceros, colchas y, por supuesto, los productos más habituales como son gran variedad de mantas, almohadones, mantones y chales de diferentes fibras. En cuanto a producto, siempre están buscando nuevas incorporaciones a su catálogo. "Para esta Navidad vamos a sacar unos chalecos de alpaca muy bonitos. En el tema de alfombras, hemos incorporado el yute con un resultado muy original".
Todo aquel que quiera conocer las instalaciones segovianas de 'Ábbatte' puede hacer una visita guiada previa inscripción en el teléfono 92 140 30 77. Y, ya puestos, recorrer la zona aledaña al monasterio ya que tiene muchas cosas interesantes que ofrecer.
"La carretera que serpentea en la falda de Guadarrama norte, donde está el Monasterio, está llena de curiosidades con pueblos muy bonitos como Sotosalbos –aconseja finalmente Elena–. Los paseos por caminos forestales también son preciosos. La gastronomía, muy buena en todo el sector, merece una parada en el 'Restaurante La Matita', en Collado Hermoso, especializada en caza…"
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