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Sobrasada de Mallorca.

Sobrasada de Mallorca

Mallorca interior

Actualizado: 13/10/2015

Alejados de la península, rodeados por el tranquilo mar Mediterráneo, campan a sus anchas los cerdos de Felanitx. Esta localidad y sus vecinas Porreres y Santanyí son lugares únicos para descansar de las prisas de la ciudad. Además de paisajes bucólicos, teñidos de azul cielo y ocre, encontramos rincones únicos y paradisíacos en la parte más íntima y recogida de Mallorca, tierra de ensaimada y exquisita sobrasada.

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La ruta

Una telaraña de paredes se despliega en esta zona de Mallorca para cercar los campos de cultivo, fruto de la tradición y del minifundismo agrícola. Desde la primavera hasta el invierno, en Felanitx, punto de partida de la ruta, y en las tierras de sus localidades vecinas, Porreres, Montuïri, Campos y Santanyí, pasta el animal totémico de Mallorca, el cerdo, cuyas carnes magras son ingrediente capital de la célebre sobrasada.

En Felanitx destaca la iglesia de San Miguel, levantada en el siglo XIV. Su fachada renacentista, compuesta por una espectacular escalinata y un gran rosetón, sirve de telón de fondo al mercado de cada domingo, donde predomina la venta de alcaparras y cerámica con motivos florales. En la misma plaza, nos detenemos también en el edificio de la Casa de la Cultura y luego damos un paseo por los callejones medievales observando detalles urbanos posmodernistas.

La expansión de esta localidad balear fue consecuencia de las exportaciones en el siglo XX de vino, almendra, albaricoque y en especial, de la sobrasada. Fuera de la ciudad destacan las moles de dos iglesias en el montículo del Calvario y en el monte Sant Salvador, destinos desde los que se tiene una panorámica espectacular del levante y del sur de la isla. Podemos admirar maravillosos campos de almendros y observar las copas de los algarrobos, los olivos y los pinos. Vides y albaricoqueros completan la piel rural de esta zona de Mallorca que rinde buenos vinos y frutos secos.

Nuestro siguiente destino es Campos, un pueblo agrícola rico en prehistoria. Sus casas góticas y bajas están construidas con piedra terrosa. La villa está protegida por cinco torres defensivas. Sus iglesias mantienen el sabor antiguo que también se encuentra en las buenas pastelerías del lugar. Resalta el antiguo hospital medieval, de estilo gótico y cubierto por una bóveda de crucería. Actualmente funciona como sala de exposiciones y de actos culturales.

A pocos kilómetros queda Es Trenc, una inmensa playa sin construcciones que le den sombra y que conserva un cierto aire de paraíso tropical. La ruta continúa hacia Porreres, donde observamos el estilo de vida payés y sus tradiciones agrícolas. Aquí se fabrican todavía artesanalmente la sobrasada, el paté y varios tipos de galletas. En invierno, durante la matanza, las higueras, que junto con los almendros, son un árbol típico de Mallorca, se quedan sin hojas y forman un bellísimo paisaje. Desde Porreres se divisa la Muralla Talayótica des Pou Salat.

Playa de Es Trenc.
Playa de Es Trenc.

Desviándonos hacia Montuïri por la carretera que llega a Son Fornés, observamos un santuario romano del siglo II a. C. Y conduciremos entre la curiosa arquitectura de los marges (márgenes), que protegen los cultivos de los vientos fríos del norte y secos del sur. La ruta sigue hasta Petra, donde está la casa natal de fray Junípero Serra, fundador de San Diego, San Francisco, Sacramento y Los Ángeles, en California. Merece la pena subir al montículo de Bonany por sus vistas al llano insular. Una ermita se encarama en este lugar, desde el que este fraile lanzó su último sermón antes de partir hacia América.

Para concluir el recorrido, nos acercamos al puerto de Felanitx, Portocolom. La ensenada es una mixta y peculiar colonia de veraneantes y pescadores con el ambiente local intacto. El puerto está casi encerrado y cuenta con la playa interior de S’Arenal. También podemos ir hacia el litoral de Santanyí, con su peculiar ex colonia de artistas en cala D’Or, o a Portopetro, cerca del Parque Natural de Cala Mondragó.

Vista de Portocolm, el puerto de Felanitx.
Vista de Portocolm, el puerto de Felanitx.

El sabor

La sobrasada de Mallorca es la reina indiscutible de la gastronomía mallorquina. Su sabor, su olor y su aspecto surgen de la necesidad de conservar alimentos durante largos periodos de tiempo. El proceso de elaboración tiene dos fases. La primera es el picado, mezclado y embutido de las materias primas. La segunda es su proceso de secado y maduración. Para la conservación de este característico embutido, se utilizan técnicas específicas de salado, resultando un producto crudo curado.

En la actualidad, existen dos variedades: la elaborada con carnes de cerdo y la que sólo contiene carne de cerdo negro, embutida en tripas naturales. Los cerdos son criados y alimentados de acuerdo con prácticas tradicionales. Para su elaboración se utilizan, en proporciones reglamentadas, carne magra de cerdo, tocino, pimentón, sal, especias y aromas naturales. La sobrasada es un alimento con alto valor energético, aportando una media de 650 kcal./100 gr. El pimentón, uno de sus ingredientes básicos, ejerce una función antioxidante. Todos los detalles sobre la sobrasada pueden encontrarse aquí.

Más información

Qué comprar

Si hay algo que define a Mallorca son las preciadas manos de sus famosos artesanos que trabajan el cuero y la cerámica con gran maestría. En Porreres podemos encontrar las albarcas y las alpargatas rurales, usadas por miles de ciudadanos, especialmente en verano. En Felanitx y otros pueblos mallorquines hay tiendas de cerámica popular.

Tesoro oculto

Una parada obligada es la del santuario de Montision, en Porreres. Se trata de una construcción del siglo XIV hoy convertida en albergue. En el camino de ascenso encontramos siete cruces de piedra del mismo siglo y de estilo posgótico que simbolizaban las alegrías y los males. La cima ofrece sensacionales vistas de la zona

Fiestas

El 20 de julio se celebra en Felanitx la fiesta en honor a su patrona, Santa Margalida, con el famoso baile de los cavallets. Además, el 28 de agosto, rinden honor a su patrón, San Agustín. En Porreres, la fiesta más popular es la de San Roque, el 16 de agosto. En septiembre, se celebran mercadillos en Felanitx y en Porreres.

Alojamientos

Para disfrutar de la paz, el silencio y el sol de Mallorca, el Hotel Son Siurana es muy recomendable. Se trata de un precioso hotel rural, situado entre Alcudia, Pollença y Sa Pobla, en una antigua finca agrícola y ganadera, restaurada con un gusto exquisito. Pero igual de encantador es el Hotel La Reserva Rotana, en la costa este de Mallorca. Un lugar de lujo, rodeado de bellos jardines y campos de cultivo paradisiacos.