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En Alboloduy, situada al borde oriental del Parque Nacional de Sierra Nevada, se inicia esta ruta que recorre la provincia de Almería: tierra de contrastes, playas desiertas y cuna del afamado tomate La Cañada-Níjar. Punto de partida de varias excursiones, desde aquí podemos seguir el desfiladero del río Nacimiento, recorrer la rambla de los Yesos o el barranco de los Catalanes, todas ellas rutas de fácil a moderada dificultad. Tras decidirnos por cualquiera de estas alternativas y volver al pueblo, continuamos hasta Santa Cruz de Marchena.
Es el momento de disfrutar del sosiego de esta localidad de terrazas en los tejados y visitar la iglesia mudéjar de Santa Cruz, levantada en lo que antiguamente era una mezquita. Tras esta parada proseguimos pasando por Alsoduz y Alhabia, hasta alcanzar Terque, un pequeño pueblo lleno de edificaciones burguesas que se mantienen como testigos silenciosos del esplendor económico que vivió la zona gracias al pasado minero de la sierra de Gádor y el cultivo de la uva de mesa.
A continuación cruzamos por varias localidades que merecen por lo menos una breve visita. Illar, de estructura árabe-cristiana, esconde encantadores rincones impregnados de esa poesía de la sencillez rural que hace que todo parezca más auténtico, mejor. La fuente y el lavadero, la plazoleta que hay sobre ambos o las casas que se asoman entre los huertos ayudan a que hagamos las paces con el mundo. En Huécija se encuentra el convento de los Agustinos, uno de los mejores ejemplos para contemplar la grandeza de la arquitectura barroca almeriense.
El poblado prehistórico de Los Millares está rodeado de uno de los mayores conjuntos de tumbas megalíticas conocidos en Europa
Nos adentramos ahora por un terreno en el que abundan los yacimientos arqueológicos. El pasado histórico de Alhama de Almería se debe en buena parte al poblado de la Edad de Cobre de Los Millares, el puente romano y los restos de los baños árabes que se conservan en el hotel-balneario de San Nicolás (Baños, 2; 950 641 361). Además, esta localidad está íntimamente vinculada al cultivo del tomate y celebra la fiesta de inauguración de la temporada de la plantación con un encuentro de agricultores que coincide con la campaña de otoño-invierno.
Llegamos a Benahadux, un pequeño pueblo que acoge en su interior los restos arqueológicos de la ciudad íbero-romana de Urci, así como la residencia de los vizcondes del Castillo de Almansa y el caserón Dos Torres. Desde ahí tardaremos poco en llegar a Gádor y Santa Fe de Mondújar para ver el poblado prehistórico de Los Millares (ctra. Nacional 324; 677 903 404). Este yacimiento es excepcional por su gran extensión y complejidad defensiva y por estar rodeado de uno de los mayores conjuntos de tumbas megalíticas (hay alrededor de unas 300) conocidos en Europa. En Gádor destacan sus cuevas medievales sobre la rambla de las Herrerías, el Castillejo, fortificación de época califal, y las necrópolis árabes de Paulenca, Quiciliana, Jacalgarín y Rabanillo. De vuelta hacia Benahadux, nos acercamos a Rioja, donde se mantienen restos históricos de los poblados del periodo Neolítico de Majada del Carnero, Mesica del Abriojal y cerro del Tesoro. También destaca la muralla del cerro de El Fuerte, construida por los romanos.
Dos nuevas paradas nos brindan la posibilidad de entrar en contacto directo con la naturaleza. En Pechina bajamos del coche para hacer un poco de senderismo por el Paraje Natural de Sierra Alhamilla para terminar el día visitando el yacimiento arqueológico de Bayyana. En Viator, por su parte, un sinfín de barrancos y ramblas, cañadas y veredas nos invitan a recorrer la zona a pie para disfrutar de los alrededores. Tras una breve pausa en Huercal llegamos a Almería capital y a la Cañada de San Urbano.
La catedral de Almería (plaza de la Catedral, 0; 950 234 848) es uno de los mejores ejemplos de iglesia-fortaleza. Si disponemos de tiempo, también es una buena opción visitar la alcazaba (Almanzor, s/n; 950 801 008), la segunda más grande de España, y dar una vuelta por su paseo marítimo. El final de nuestra ruta pasa por Níjar, donde podemos seguir un itinerario que permite ver los castillos del Huebro, San Felipe, San Pedro, San Ramón, Tárbal o el del Peñón de Inox, y aprovechar la oportunidad para visitar el Parque Natural Cabo de Gata-Níjar. Otra alternativa es ir desde Níjar hasta Carboneras, donde es obligado visitar el castillo de San Andrés y la torre de los Diablos, además de pasear por sus pintorescas calles o darse un baño en sus hermosas playas.
El sol y el clima subtropical y mediterráneo explican la calidad de estos tomates que cada año están presentes en las principales ferias del sector, entre ellas en el Salón del Gourmet, que se celebra en Madrid, y en Alimentaria, cita que tiene lugar en Barcelona. Con un intenso sabor y olor, los tomates de La Cañada-Nijar se clasifican en diversos tipos: redondo liso (buen sabor, color rojo intenso y larga conservación), asurcado (extremado dulzor, forma externa irregular y color verde intenso), oblongo (sabor suave y textura carnosa, piel fina y color rojo intenso) y cereza (con alto contenido en azúcar, muy sabroso y aromático). A pesar de la variedad todos tienen en común su calidad superior (extra o primera), con pulpa firme y un color acorde a su estado de madurez.
El tomate es un 90% agua, por lo que es un alimento más que aconsejable durante el verano. Además, es rico en vitamina A (carotenos), vitamina C y E. Contiene licopeno (substancia con alto poder antioxidante) y es una importante fuente de potasio, primordial para la ejercitación muscular y para mejorar la relación sodio/potasio de la dieta, tan importante en el tratamiento y prevención de la hipertensión. Más información sobre el tomate de La Cañada-Níjar en www.tomatemediterraneo.com
El Parque Natural del Cabo de Gata-Níjar se extiende por los términos municipales de Almería, Carboneras y Níjar. En él, podemos admirar un tramo de litoral mediterráneo jalonado por acantilados, calas pequeñas y solitarias, extensas playas e incluso arrecifes. Pese a ser el enclave más árido de Europa occidental, alberga formas de vida animal y vegetal muy peculiares.
Unos kilómetros al sudeste de Níjar se encuentra el cortijo del Fraile. Construido por los dominicos de Almería en el siglo XVIII, su fama se debe al asesinato que ocurrió en sus inmediaciones el 22 de julio de 1928, conocido como “Crimen de Níjar” y que inspiró la obra de teatro Bodas de Sangre, de Federico García Lorca.
Además de sus excelentes tomates y otros productos hortofrutícolas, podemos degustar los dulces de Alboloduy: Gurullos, merengues, Soplillos, Pan Dormido y Pan de Mosto. El membrillo de Pechina es especialmente sabroso. En Carboneras, villa costera, destacan los pescados procedentes del Mediterráneo.
Si se buscan vistas a las cálidas aguas de la bahía de Aguadulce de Almería, el Hotel HLG PortoMagno (paseo Marítimo s/n; 950 342 216) es el alojamiento perfecto: cuatro estrellas con spa y en primera línea de playa. También en primera línea de playa y muy cerca de tres campos de golf, el Hotel Playa Dulce (avda. del Palmeral s/n; 950 341 274) en la opción perfecta para descansar y practicar deporte.
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