{{title}}
{{buttonText}}

Una cata de vino dentro de un festival musical

Aranda de Duero, Burgos

Compartir

Es difícil molar más que el Sonorama, el festival que cada verano revoluciona la pequeña localidad burgalesa de Aranda de Duero para celebrar el pasado, el presente y el futuro del pop español, así como las bondades y variedades del Ribera de Duero. Las calles, plazas, bares y restaurantes del municipio, además del recinto ferial que acoge el grueso de conciertos, reciben con los brazos abiertos a los más de 50.000 asistentes que cada año, por la segunda semana de agosto, disfrutan del cartel musical de cada edición. 

El Sonorama está impulsado por el colectivo cultural Art de Troya, un capital humano de casi 400 jóvenes arandinos que colaboran en el funcionamiento del mismo y en el desarrollo de su pueblo. A lo largo de estas dos décadas la propuesta ha ido creciendo y virando hacia un cartel exclusivo de grupos y solistas españoles, ganando adeptos entre el propio gremio musical y los aficionados a la música con denominación de origen. El vino es el otro gran reclamo del festival, igual de potente que el mejor de los cabezas de cartel. El Consejo Regulador de Ribera del Duero realiza catas gratuitas a los asistentes, con el asesoramiento de un enólogo en la bodega subterránea del Centro Cultural Caja de Burgos. También desde el festival se realizan visitas guiadas a distintas bodegas de la comarca.

Localización

Centro Cultural Caja de Burgos