Fiestas de San Prudencio y Nuestra Señora de Estíbaliz

Vitoria-Gasteiz, Araba/Álava

Abril estira sus últimos días en Vitoria-Gasteiz. La ciudad se prepara para rendir tributo a San Prudencio, patrón del territorio histórico de Álava. La plaza de la provincia se queda pequeña en la víspera de una festividad que los vecinos locales esperaban con ansia. 3,2,1... comienza el estruendo. ¿Los culpables? Los tambores que hacen temblar los cimientos del lugar para regocijo de los presentes, que no caben en sí de gozo. Allí, ataviados con delantales y sombreros blancos, se citan los principales representantes gastronómicos y cocineros de la provincia. Estos, recorren las calles a doble ritmo, ya que otro instrumento, el txistu, también ha querido sumarse al festejo. Entretanto, algunos aprovechan para degustar los tradicionales caracoles o el revuelto de perretxikos. Es el prólogo de unas horas maravillosas. San Prudencio no tarda en aparecer y aprovecha su día desde el principio. Tras la romería en la basílica de la Armentia, la diversión se traslada a las campas adyacentes en las que todos disfrutan de actividades varias, cata de vinos, concursos gastronómicos o deporte rural, entre otros. El mejor cierre para una fecha marcada en rojo en el corazón de Vitoria-Gasteiz.