Compartir

{{title}}
{{buttonText}}
1 /

Burgohondo

Baño de naturaleza en el Alberche

Municipio de unos 1.200 habitantes que incluye el anejo de Puente Nuevo y dista de Ávila  47,4 km.

Su nombre lo define, burgo hondo (o burgo del fondo), población situada en un valle profundo y rodeado de lomas, al norte del macizo oriental de Gredos. Es un paisaje tan fluvial como serrano no solo por el río Alberche, que a estas alturas empieza a amansarse, sino por la maraña de arroyos que lo engordan, por ejemplo el Sotillo, el Horcajo o las gargantas de la Hiedra y Navalacruz.

Así combina terrenos agrestes con abundantes afloraciones de granito, dehesas y bosques, sotos y vegetación de ribera, vega para huertas y frutales… Y los infalibles prados cercados en la serranía abulense. Al este, remontando el río, se despliega otro mundo acuático y forestal: el gran pantano del Burguillo y la Reserva Natural del valle del Iruelas, que forman un botánico complejo con más de 600 especies vegetales y bosques muy diversos. Algunos son propios del norte peninsular, aquí posibles gracias al microclima del valle.

Abundan también las zonas de baño accesibles. Una de las más frecuentadas es la Tabla de Abades, a solo dos kilómetros del pueblo. Aguas abajo del Alberche hay otra junto a la postal del puente romano, la zona de Puente Arco; no es raro ver piragüistas. Más: el Pantanillo y el Cañal a la sombra de los alisos; la Playita y más abajo Puente Nueva, con prados y zonas para picnics.

Burgohondo conserva varias casas de estilo serrano en sillarejo, algunas encaladas con refuerzos de sillar en las esquinas, dos ermitas y la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, que forma un amplio conjunto eclesial junto con un atrio y un antiguo monasterio. También destacan la casona del ayuntamiento y un viejo edificio escolar al que el pueblo tiene cariño porque se construyó gracias al esfuerzo colectivo. Después se reconvirtió en negocio hostelero.

Múltiples rutas entre cerros, bosques y cauces. Algunas tienen objetivo etnográfico, como la de las Umbrías entre viejos caseríos serranos. Otras suben a crestas como el Mojón Cimero, de casi 2.000 metros de altitud. Y algunas menos exigentes, por ejemplo la de los Bonales, cruzan paisajes de ribera entre huertas y frutales, sobre todo melocotoneros de buena fama. La del Tejar demuestra la variedad paisajística del término y prefiere rodearse de encinares viñas.

Información de contacto

  • Teléfono

    920283199

    Llamar
  • Web

    http://www.burgohondo.es/

    Ver web

Reportajes recomendados Ver todos

Ver todos