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Carballeda de Valdeorras

Un ‘Teixedal’ único en la alta montaña

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Los romanos buscaron oro en el Sil, la extracción de pizarra sirve actualmente de motor económico y el Teixedal, un bosque de tejos único en su especie en Europa, brilla como una joya natural enclavada en las proximidades de Pena Trevinca. Todo ello está en Carballeda de Valdeorras, municipio extenso (224 kilómetros cuadrados), que sirve de límite geográfico con las provincias de León y Zamora. En Carballeda se pasa de los paisajes ribereños en torno al río Sil, de apenas 400 metros de altitud, a los más de 2.000 de algunos de los picos más altos de Galicia, ahí donde las montañas del macizo de Pena Trevinca aparecen casi permanentemente nevadas en invierno y permiten el esquí de fondo.

Sobradelo, capital del municipio, se encuentra dividida en dos por su monumento más emblemático, A Ponte Nova, construido entre los siglos XVI y XVII sobre el Sil con siete arcos de piedra roja del país. Durante la Guerra de la Independencia contra los franceses, el Abad de Casaio mandó derribar el arco central para evitar el paso de las tropas enemigas y no fue hasta finales del XIX cuando se reconstruyó. En los márgenes del Sil hay un paseo o malecón para disfrutar de la ribera del río, donde se celebran las Fiestas de la Encarnación, las más importantes del municipio, entre finales de marzo y principios de abril.

De Sobradelo parte la carretera para acercarse hasta el Teixedal y hasta el macizo de Pena Trevinca. El camino discurre por Casaio, de donde sale una senda para la Ermita de San Xil que discurre por la aldea de Lardeira, considerada la más alta de Galicia, a 1.240 metros de altitud, y se acerca a O Teixedal, joya formada por alrededor de 400 ejemplares de tejo, muchos centenarios y algunos con mil años de antigüedad.

Aunque los remontes para practicar esquí fueron abandonados hace tiempo, el Centro de Desarrollo Turístico de Fonte da Cova, propiedad del Ayuntamiento, con cafetería y restaurante en régimen de concesión, es el referente para acercarse a las cumbres nevadas para los amantes de la alta montaña. Aquí inició sus actividades el Club Pena Trevinca con un refugio hace muchos años, y existen rutas de senderismo que permiten varias horas de caminata para acercarse al Teixedal, a las antiguas minas de wolframio de Valborraz o hasta la cumbre de Pena Trevinca, el pico más alto de Galicia con 2.127 metros, ya en el municipio de A Veiga.

Y todo con la peculiaridad que ofrecen las montañas excavadas para la extracción de pizarra. De las entrañas de Carballeda sale gran parte de este material que se vende en todo el mundo, generando una economía de la que depende en gran medida toda la comarca de Valdeorras. Las explotaciones a cielo abierto son una escuela perfecta para quienes quieran conocer de un simple vistazo los sistemas de extracción de este mineral.

Las altas cumbres del sur contrastan con los valles del Sil y el Casaio al norte, y con el agua remansadea en el Embalse de Pumares, a 400 metros de altitud, con una vegetación ribereña y donde anidan colonias de patos.

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