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La Solana

Tierras de azafrán… y zarzuela

Federico Romero ubicó en La Solana su célebre zarzuela La rosa del azafrán. Quizás por ello, esta localidad manchega es famosa por el género chico (al que le dedica una semana en octubre), el azafrán y sus hoces. Su casco urbano es uno de los más llamativos de la provincia. En él destacan la Plaza Mayor como eje vertebrador, con el Ayuntamiento del siglo XVI y la iglesia de Santa Catalina, declarada Bien de Interés Cultural. La parroquia se levantó en el siglo XV y cuenta con una imponente torre barroca, considerada la más majestuosa de la provincia, aunque la original de 1618 se derrumbó y la que permanece fue reconstruida en 1708.

La iglesia de San Juan Bautista, del desaparecido convento de los Trinitarios fundado por Fray Juan Bautista, es barroca y conserva un pasadizo que cruza la calle del Arco del Convento. La iglesia de San Sebastián, Monumento Histórico Artístico, destaca por su acceso a través de un patio y su cubierta mudéjar. También hay que visitar las ermitas de San Sebastián, del XIV (el templo más antiguo de la localidad), de Santa Quiteria, del XVI, y del Humilladero, del XVIII, además de la Casa de Don Diego, del siglo XIX, Bien de Interés Cultural, que mantiene su patio porticado típico manchego y hoy alberga un Centro Cultural y la Oficina de Turismo.

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