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Tramacastilla de Tena

Entre 'castillos' pirenaicos

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Trambacastiella, ‘entre castillos’ era el nombre romano de esta población oscense. Los castillos a los que se alude no son fortificaciones militares, sino los mucho más sólidos y duraderos montes que lo rodean. Con el pantano Búbal besando sus casas, peña Blanca y Peña Telera se levantan sobre el pueblo para custodiarlo y regalar a sus visitantes la vista de los colosos.

El turismo en Tramacastilla de Tena está dedicado, fundamentalmente, a las actividades de montaña y aire libre. Pocos lugares se pueden encontrar mejores: senderismo, bicicleta, hípica, barranquismo, escalada y, por supuesto, en invierno, esquí. Una vez en el pueblo, para descansar, nada mejor que un relajado paseo por sus calles empedradas que encaminan entre sus casas de sillería y sus pajares bien cuidados a la Plaza Mayor y a la Iglesia románica de San Martín, que recibe visitas desde el siglo XII. Del XVI es el interesante retablo que hay en su interior.