{{title}}
{{buttonText}}

Carucedo

Encanto rural, encanto natural

Compartir

La hoy generalizada expresión turismo rural se inventó pensando en pueblos como Carucedo, en León, pequeños paraísos verdes en los que un reducido poblado de bajas casas de piedra se abre por cualquiera de sus costados a un entorno bucólico de lagos, montañas, rutas, yacimientos y miradores al infinito. Ese es el principal y (literalmente) enorme patrimonio turístico de la localidad, formada en total por siete núcleos de unas pocas casas dispersas: La Barosa, Campañana, El Carril, Carucedo, Lago de Carucedo, Las Médulas y Villarrando. A  pesar de su reducida población, al municipio aún le da espacio para albergar, pegada a Las Médulas, una primitiva iglesia románica en donde se guarda una pieza de platería rococó del siglo XVIII de las más importantes de El Bierzo.

Alzando la vista sobre esa iglesia se divisa el más singular tesoro de todo ese patrimonio mencionado arriba: Las Médulas. La extraña belleza  de estas montañas rojizas es mitad obra de la Naturaleza y mitad de la mano del hombre, concretamente de los ingenieros romanos que perforaron y drenaron sus colinas para obtener el oro que guardaban en su interior. El resultado es un paisaje con una paleta de colores única, que ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. También producto de esas obras nació el lago de Carucedo. Hoy es el relajante lugar de refresco de turistas y lugareños en un entorno de aves, vegetación, aguas azules... Turismo rural en estado puro.

Contacto

Reportajes recomendados Ver todos

Ver todos