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Cistérniga

Arrabales de Valladolid con esencia propia

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A solo cinco kilómetros de Valladolid, La Cistérniga es el municipio donde se puede desconectar de la ciudad y respirar aire puro a orillas del Canal del Duero. Su origen se remonta a la Edad de Cobre y de Bronce, según los restos arqueológicos encontrados en su territorio, y durante siglos ha sido escenario de acontecimientos históricos curiosos, como una boda medieval con novia a la fuga si esto hubiera sido posible en la época. Al parecer,en 1601 doña Inés de Vargas negó hasta dos veces en el altar de la iglesia de Cistérniga a su prometido, el insolente marqués de Sieteiglesias, Rodrigo Calderón, pero finalmente no le quedó más remedio que aceptar el matrimonio.

Otros monumentos interesantes de la localidad son un torreón medieval del siglo XV, cercano a una iglesia románica, ambos de propiedad privada dentro de la Dehesa de Fuentes del Duero. A solo 200 metros encontramos una obra de ingeniería civil digna de contemplar: el Puente de Hierro sobre la antigua vía ferroviaria de Ariza, hoy en desuso, que ofrece una magnífica fotografía del paso del tiempo. En la Plaza Mayor se puede ver otra obra de arte del siglo XXI, la escultura “La Bañista”, de Belén González, que emerge del suelo y sirve de zona de juegos para los más pequeños.

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