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Gallegos de Solmirón

Un pedazo de historia en el límite con Ávila

En el límite entre Salamanca y Ávila, a 65 kilómetros de Salamanca y 23 de Guijuelo, se encuentra la localidad de Gallegos de Solmirón, un tranquilo pueblo que recibe su peculiar nombre de la repoblación llevada a cabo por parte de los cristianos del norte de la península y por el monte de Mirón, ya en la provincia abulense, a la que perteneció hasta finales del siglo XIX.

Uno de los principales atractivos del pueblo es la iglesia de San Juan Bautista, que data del siglo XV y que luce pilares con base gótica y una torre de la misma época pero estilo románico. En su campanario, donde hoy hay instalado un pararrayos, hasta principios de los años 90 del siglo XX se podía ver un gran escultura del Sagrado Corazón, pero su peso hizo que la estructura se estuviera hundiendo y tuviera que ser retirada. Actualmente, dicha escultura está en lo alto del cerro de Santa Brígida, una de las rutas recomendadas para hacer desde Gallegos, y desde donde se aprecian las mejores vistas del pueblo. De la iglesia también cabe destacar la sacristía, que data del siglo XVII, y los restos que se pueden encontrar en el altar mayor de una imagen de Santo Domingo de Guzmán y de una espada y una cruz que dan base a la teoría de que, anteriormente, había un convento dominico adosado a la iglesia que, al parecer, dependería del de la localidad abulense de Piedrahita.

Otro de los lugares que hay que visitar en Gallegos de Solmirón es su ermita, situada a las afueras del pueblo, en las eras. En ella se guarda durante la mayor parte del año la Virgen de Gracia Carrero, que debe su nombre a la finca donde fue encontrada, y que es subida a la iglesia en procesión en mayo hasta la celebración de sus festejos, en agosto. Unas fiestas que aún a día de hoy organizan mayordomos y que se unen a las de los quintos. Desde la ermita también hay una hermosa vista del pueblo y, detrás de ella, se puede apreciar una cadena montañosa cuyo punto más alto, el Picarozo, también merece una excursión, aunque teniendo en cuenta el desnivel que supone.

De vuelta al pueblo se puede hacer una visita a la plaza Mayor y al ayuntamiento, que luce una placa que conmemora el paso de Carlos V por el municipio, donde durmió una noche —concretamente en la Casa del Cura, situada en la carretera—, camino a su retiro en el monasterio de Yuste. De hecho, Gallegos de Solmirón se incluye en las rutas relacionadas con este camino.

También merece mención los pilares que se pueden encontrar dentro del pueblo, destacando el Caño, los Entremuros, las Eras de Abajo y la Fuente del Molino, que está tapiada. Fuera del pueblo, destaca el Pilón de 7 codos (que se llama así por sus seis caños y la caída al suelo) que también es punto de encuentro de los vecinos, que suelen hacer la ruta hasta allí para pasar el día. Los Guindos, antiguos lavaderos que se siguen conservando, también pueden visitarse.

Información de contacto

  • Teléfono

    923590001

    Llamar
  • Web

    http://gallegosdesolmiron.es/

    Ver web

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