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Matapozuelos

La capital del conejo de Valladolid

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El río Adaja y el Eresma por un lado, la exuberante vegetación por otro... Esto es Matapozuelos (Valladolid). Ver cómo los cursos fluviales se abren paso a costa y beneficio de la propia localidad es tan habitual y reconfortante como un parpadeo. Lo que también resulta reconfortante es la silueta de la inmensa torre que desafía las alturas, un ojo monumental con el que la iglesia de Santa María Magdalena vigila y protege a los suyos, mientras degustan pinchos de lechazo, de conejo a la brasa o empanada de conejo, como puede esperarse de la capital del conejo.

Ciertamente, los turistas no pueden quejarse de sitios interesantes donde fotografiarse y presumir de haber pisado tierras castellanas, basta ver la vegetación que abraza la querida ermita de Sieteiglesias, pisar el legado romano en el puente del mismo nombre y el Colegio de San Gregorio y reconstruir la historia en los asentamientos romanos. Matapozuelos no olvida a quienes les va la marcha durante las Fiestas Patronales en honor a Santa María Magdalena; no en vano son populares la Fiesta de las Águedas y el anual éxito de la Romería de la Virgen de Sieteiglesias.