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Molinillo

Tranquilidad a las puertas de la Sierra de Francia

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En las estribaciones de la Sierra de Francia, el río Alagón, como afluente más largo del Tajo, crea meandros que hacen de muralla natural en la parte occidental del término de Molinillo. Estas riberas fluviales constituyen el alma natural del municipio salmantino. Una vez hemos atravesado la corriente, recorreremos un paisaje ondulado tejido por las montañas hasta adentrarnos en el centro de la villa. Su trazado urbano incluye elementos característicos de la arquitectura montañesa, que se pueden percibir en las balconadas tradicionales de las viviendas. Como principal monumento de interés, sobresale la iglesia parroquial, que combina el blanco de sus muros con el granito. En esta pequeña población de menos de cien habitantes se respira la paz de las pequeñas villas serranas. 

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