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Peñaflor de Hornija

Privilegiado mirador de los Montes Torozos

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Peñaflor de Hornija es considerado el mirador de los Montes Torozos por su posición privilegiada sobre el paisaje castellano. Este pueblo vallisoletano en tiempos fue también un pueblo-vigía, con una muralla defensiva de la que apenas quedan restos. Su época de florecimiento tuvo que ver con la llegada de nobles y blasones que todavía hoy se pueden ver en algunas de las casas de la localidad, como la del Conde de Peñaflor.

Esta localidad, en pleno Valle del Hornija, forma parte del Camino de Madrid hacia Santiago de Compostela y permite el descanso de peregrinos en un recoleto albergue situado en la Plaza Mayor. Aquí podemos encontrar también la Iglesia de Santa María de la Expectación, construida en piedra en el siglo XIII, que esconde entre sus muros varios retablos de singular belleza. Algunas piedras de la plaza dan testimonio de otra iglesia de la misma época, hoy desaparecida. Si seguimos paseando por el pueblo encontraremos la Plaza del Cristo de las Eras y la ermita del mismo nombre, del siglo XVI, cuya joya escultórica es un Cristo de casi dos metros de altura situado en el retablo mayor. La fiesta grande en su honor se celebra el tercer domingo de septiembre con charangas, verbenas, juegos tradicionales y comidas populares.

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