{{title}}
{{buttonText}}
1 /

Valverdón

Cuna del discurso que llevó al descubrimiento de América

Compartir

A 13 kilómetros de Salamanca, en la orilla del río Tormes, se encuentra la localidad de Valverdón, un pequeño pueblo de unos 300 vecinos que está muy ligado a una gesta tan importante como el descubrimiento de América por parte de Cristóbal Colón. Y es que Colón pasó largas temporadas en el convento dominico de San Esteban de Salamanca y acudía a la Hacienda de Valcuevo que los monjes dominicos poseían dentro del municipio de Valverdón y donde también se encontraba el Caserío Zorita. En la Hacienda de Valdecuevo el descubridor mantuvo largas conversaciones con fray Diego de Deza para convencer a los Reyes Católicos y conseguir su apoyo económico para el largo viaje.

En la finca se encuentra, precisamente, el primer monumento erigido en España en honor a Cristóbal Colón. Se trata de un monolito en forma de pirámide que termina con un globo terráqueo sobre una base con cuatro pedestales dóricos rodeados por una verja de hierro. Fue creado en 1866 por Mariano de Solís y García y restaurado en 1979 por Rafael Sánchez Fabrés. Para conocer este lugar y los alrededores de Valverdón lo mejor es seguir una ruta que parte desde la zona baja del pueblo y que, a través de varios caminos agrícolas, guía al caminante hasta el monolito, situado a unos dos kilómetros del núcleo urbano. El camino, que lleva el nombre de ‘La ruta del Navegante por los mares de cereal’, es de dificultad baja, tipo circular y suma una distancia total de 9.820 metros.

Parte de aquella hacienda que acogió a Colón se ha convertido hoy en el Parque de Valcuevo, un espacio natural abierto –aunque con un horario de uso que varía según la época del año– en el que se puede disfrutar de la vegetación y la fauna típicas de la zona y hacer varias rutas a pie o en bicicleta. De entre las construcciones que se pueden encontrar en la hacienda destacan un molino árabe reconstruido y un antiguo palomar.

En cuanto al entorno natural cabe destacar la presencia de un álamo negro y un árbol del paraíso y de cuatro secuoyas gigantes de más de 130 años de antigüedad y 40 metros de altura, que se incluye en la Ruta de las Catedrales Vivas. De la naturaleza de Valverdón también hay que destacar su paseo fluvial y la presencia de un antiguo molino de agua en la zona de La Aceña, en las inmediaciones del río Tormes.

En el núcleo urbano se puede visitar la Iglesia de San Juan Bautista, construida en el siglo XIII, aunque ha ido sufriendo cambios con el paso de los años.

Contacto