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Castillo de Marcila

Marcilla, Navarra

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Resulta curioso ver en el centro de la villa este pequeño castillo que desentona con los pisos que se encuentran a su alrededor. Nada de ruinas, sino una completa fortaleza que se asienta como punto neurálgico de las calles estrechas y de ladrillo que salen de la plaza, como si fueran los rayos de sol. Allí, el siglo XV alumbró las primeras piedras, en un bloque de planta cuadrada que busca asentamiento antes que altura. Aunque las torres no estén de acuerdo, ellas se alzan reflejando el astro navarro, unos prismáticos curiosos que han ojeado durante más de 6.000 años todo lo que ocurría a su alrededor. Actualmente, ya no tienen miedo a los asedios, ni a que los asaltantes invadan la fortaleza. Ahora se dedican a otra cosa, como a disfrutar de las fiestas, de los conciertos de Marcilla de los sábados y de los viajeros que se acercan hasta ellas con smartphones en la mano. Incluso a veces notan el sabor de la huerta entre sus piedras. Quizá nos hayamos equivocado y este castillo ni siquiera desentone tanto con la antiquísima villa que protege, ni con los pisos de su alrededor. Enquistado en el corazón de Marcilla, forma parte de su color.

Localización

Castillo de Marcilla, Plaza de la Cava, 1, 31340 Marcilla, Navarra