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Cueva de Santimamiñe

Kortezubi, Bizkaia/Vizcaya

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La pinacoteca más valiosa estaba ya en el pueblo antes de que allí se levantase ningún edificio. Sin embargo, durante muchos miles de años las pinturas de la cueva de Santimamiñe permanecieron ajenas a cualquier ojo, ocultando su tesoro a nuestra mirada. Ya en el siglo XX, en 1917, fueron descubiertas por el equipo Arazandi-Barandiaran-Eguren. Su excavación reveló un yacimiento de restos arqueólogos de primer orden, entre los que sobresalía una enorme colección de pinturas rupestres paleolíticas. Y es que en las paredes de Santimamiñe, como un zoológico completo tatuado sobre la piedra, había representaciones de caballos, bisontes, un bóvido, un jabalí, un oso pardo, una cabeza de ciervo… y así hasta un centenar de especies de fauna prehistórica.

Aunque la cueva de Santimamiñe, declarada patrimonio de la humanidad en 2008, tiene actualmente restringido el acceso al público general, todo aquel que quiera puede conocerla mejor acercándose al área de interpretación y visita virtual que se ha puesto en marcha en la ermita de Santimamiñe.

Localización

43.345426, -2.637150