{{title}}
{{buttonText}}

Iglesia de San Pedro de Tresviso

Tresviso, Cantabria

Compartir

En Tresviso siempre hay que subir. Pero no nos referimos a las montañas, que también, sino a sus calles. Las piernas siempre están en movimiento cuando paseamos por el pintoresco pueblo lebaniego. Cada poco tiempo hay que parar, no tanto para tomar resuello como para admirar el paisaje que va quedando a nuestros pies. Alguien comenta que es como estar en un avión, y no anda desencaminado. A medida que avanzamos en la escalada avistamos una robusta edificación que destaca de todas las demás por su gran porte y su color arena. De momento solo se aprecia el lateral, pero todo parece indicar que se trata de una iglesia. No tiene un gran campanario ni una gran cruz que nos lo indique, pero su altura y una especie de rosetón en su cuerpo central con varias ventanas en forma de arco lo terminan por confirmar. Rematamos la subida por unas escaleras y, ahora sí, vemos claramente un templo de planta latina con ábside semicircular. Su estructura podría hacernos pensar en el románico pero, a poco que nos fijemos en su pórtico, en su contrafuertes, en su campanario, nos damos cuenta de que es muy posterior. De hecho, la iglesia de San Pedro, construida sobre una antigua ermita del siglo XVIII, solo data de 1904. Sin embargo, por algún motivo parece haber seguido un proceso de envejecimiento prematuro que le da prestancia y venerabilidad. Recortada sobre los picos de Europa luce espléndida.

 

Contacto

Localización

43.25758, -4.668075