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Museo de Pinturas al Aire Libre

Carreño, Asturias

En Carreño, desde la primera mitad del siglo XII se realizaban murales vinculados al ámbito religioso. Sin embargo, a finales de los 70, surge en Candás, coincidiendo con la celebración de la Alborada, una actividad que consistía en plasmar en los muros de la villa diferentes escenas haciendo un homenaje a la misma. Esta iniciativa, que en origen fue de carácter privado, fomentada por la cofradía del Alba, se mantuvo a lo largo de los años salpicando arquitecturas con diversos colores y mensajes.
Así comienza esta colección de murales entre 1979 y 1982, período que coincide con el de máxima producción. Cada año, en el mes de septiembre y coincidiendo con la celebración de la Alborada, tenía lugar en la villa candasina la realización de varios murales que iban engrosando este singular Museo de Pintura al Aire Libre.