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Iglesia de Nuestra Señora de La Luz

Garafía, Santa Cruz de Tenerife

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"- Arriad las velas, controlad el timón… - ¡Capitán! No podemos con el oleaje, deberíamos tomar tierra. - ¡Marineros! Vaciad la bodega y desembarcad a la Santa, con mucho cuidado". El mar se pone en calma y con sorpresa los grumetes contemplan cómo la imagen de la Virgen se ilumina ante la noche. Según cuenta la leyenda con este acto milagroso la Virgen de La Luz decidió cual era su sitio.

Una cueva en la roca escarpada fue el primer santuario de la patrona de Garafía pero, a mediados del siglo XVII, los habitantes del pueblo de Santo Domingo decidieron construirle un lugar santo entre los vecinos. De color blanco y con remates de piedra a la vista, tan típico de La Palma, este templo de planta de dos naves cuenta con una capilla Mayor, dividida de la nave principal por arco triunfal y donde se venera la imagen de la Santa, y dos colaterales, la del Evangelio, dedicada al Buen Jesús, y la de la Epístola, que lleva la advocación de Nuestra Señora del Rosario. Sin lugar a dudas, una de las mejores fábricas mudéjares existentes en Canarias.

En su interior, tres retablos de estilo barroco protegen la imagen de la Virgen de La Luz rehabilitada en el siglo XVIII. Esta talla, conocida como candelero, es decir, solo tiene talladas la cabeza y las manos, porta en su mano derecha la imagen del Niño Jesús mientras que en su mano izquierda una vela dorada ilumina el camino de los feligreses.

Localización

Calle Anselmo Pérez de Brito, 2 38787 Santo Domingo, Santa Cruz de Tenerife