Bodega Romaila, el proyecto en Toledo de una familia de viticultores, presenta un ambicioso
proyecto que busca hacer en edición limitada vinos de la calidad y singularidad propias de un Vino de Pago en Toledo.
Enmarcado en el corazón de una finca agrícola, el viñedo, cuenta con 26 hectáreas de las variedades Tempranillo, Syrah,
Cabernet Sauvignon, Graciano y otras minoritarias en un suelo de origen cuaternario. Uvas que se alimentan de un terruño
único, con cepas bien equilibradas y que ha sido dedicado al cultivo de la vid al menos desde 1752, fecha en que la propiedad
fuera registrada en el famoso Catastro del Marqués de la Ensenada. La bodega está diseñada medida y equipada con la última
tecnología para facilitar las tareas de elaboración y crianza de los vinos en los que se trata de extraer todo el potencial de los
suelos de la finca. La elaboración de sus vinos está liderada por el prestigioso enólogo Joaquín Gálvez.