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Alcalá de Ebro

Tras los pasos del Quijote por la Ínsula Barataria

A la orilla derecha del río del mismo nombre se encuentra Alcalá de Ebro, un pequeño pueblo zaragozano vinculado a la historia de la literatura universal. ¿El motivo? Miguel de Cervantes situó aquí la famosa Ínsula Barataria gobernada por Sancho Panza en la segunda parte de 'Don Quijote de La Mancha'. Cervantes conocía bien esta zona que hoy forma parte de la comarca de la Ribera Alta del Ebro, ya que se hospedó en la cercana localidad de Pedrola, donde fue paje del cardenal Julio Aguaviva y Aragón.

La presencia del Ingenioso Hidalgo se respira casi en cada rincón de Alcalá de Ebro, cuyo edificio más emblemático es la iglesia barroca de la Santísima Trinidad (siglo XVII), en cuyo retablo mayor de estilo churrigueresco podemos ver el escudo de los Duques de Villahermosa. Fuera del casco urbano, junto a la ribera del río, una estatua en bronce recuerda las vicisitudes de Sancho Panza en la Ínsula. Alcalá de Ebro forma parte de la Ruta del Quijote, que desde Pedrola recorre estos parajes bañados por las aguas del Ebro, y en los que se pueden practicar actividades deportivas como la pesca.

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