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La Pobla de Montornès

Tradición rural en un pesebre viviente

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A cuatro kilómetros de las playas de la Costa Dorada y bajo la atenta mirada del Pic de la Mola, la montaña más alta de la Comarca del Tarragonès, encontramos esta población de carácter rural con un importante número de masías. La Pobla de Montornès nació bajo la influencia de su castillo en tiempos de la Reconquista, del que todavía se aprecian restos de sus muros. Paseando por el pueblo llaman la atención algunos edificios notables del siglo XVIII y la Iglesia Parroquial de Santa María, construida en 1575, con vueltas de estilo gótico tardío y un artístico campanario.

También merece una visita la Ermita de la Verge de Montornès, construida en el siglo XVIII sobre los restos de un antiguo santuario del siglo XIII, que guarda una imagen policromada de la virgen fechada en los siglos XVI-XVII. En este pequeño templo tiene lugar una de las festividades más esperadas: el pesebre viviente, con cuarenta años de tradición, en el que participa todo el pueblo. La escenificación atrae muchos visitantes por Navidad. Desde el municipio se pueden visitar antiguas masías y numerosas barracas de piedra, utilizadas antaño por los pastores y agricultores, en una agradable ruta que recorre buena parte del municipio y la zona del Bajo Gaià.