{{title}}
{{buttonText}}
1 /

L'Aleixar

Tierras fértiles, inspiración de artistas

Compartir

El 'fertilísimo', o 'abaisar', fue como llamaron los sarracenos a este lugar donde hoy se halla L’Aleixar y, aunque el origen del topónimo es incierto, una mirada al entorno podría confirmar esta teoría. Habitado desde la Prehistoria –se han hallado numerosos vestigios–, la singladura de sus primeros pobladores puede seguirse en el museo de la localidad. El pueblo lo forman un puñado de callejuelas y plazas recoletas que tienen en la Iglesia de Sant Blai (siglo XIV) y en la Iglesia Parroquial de Sant Martí (con portalada y órgano barroco) sus dos joyas monumentales. El pintor Joaquim Mir (1873-1940), que residió en L’Aleixar entre 1907 y 1911, plasmó en 32 lienzos la belleza de esta tierra de campos de avellanos, olivos y viñedos. Como colofón a la visita no hay que olvidar la encina monumental de 11 metros de altura y 9,45 de diámetro que es orgullo de este pueblo tarraconense.

Contacto