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Loja

La ciudad de las fuentes, una flor entre espinas

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Para quien desee casarse, la Fuente de los 25 Caños; para quien quiera curarse, la Fuente Santa, conocida por las propiedades medicinales de sus aguas. Y para los que quieran refrescarse, todas las demás. Porque fuentes de agua no faltan en Loja (Granada). Es su recurso natural por excelencia. Encontramos más de 40 fuentes a lo largo de todo su casco urbano y en general la cultura del líquido elemento está muy presente en este municipio, bañado por numerosos ríos, arroyos y manantiales en parajes como El Frontil, La Presa o Riofrío. Tanto es así que el agua tiene en Loja su particular museo, el Centro de Interpretación del Agua.

La ciudad fue declarada conjunto histórico-artístico en 1982 por su rico patrimonio. En ella, el barrio árabe es uno de los lugares más emblemáticos. Allí, la silueta de la Alcazaba, Bien de Interés Cultural, se convierte en uno de los perfiles más representativos y reconocibles de una ciudad en la que no faltan palacios, templos, conventos, jardines y casonas señoriales. Entre las edificaciones más sobresalientes encontramos la Iglesia de San Gabriel, la Iglesia de Santa María de la Encarnación, el Convento de Santa Clara, la Puerta de Jaufín, la Casa de Cabildos, el Pósito o el Caserón de los Alcaides Cristianos.

Para disfrutar de unas vistas únicas de la ciudad, nada mejor que visitar el mirador de Isabel I de Castilla. Desde allí, la reina pronunció la frase "Loja, flor entre espinas", que aparece en el escudo de armas de la ciudad. La flor es Loja, como ciudad que sería conquistada y cristianizada, mientras que las espinas hacían referencia a los alrededores, ciudades aún influenciadas por la religión musulmana.

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