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Paüls

Un pueblo de montaña resguardado por las cimas de Els Ports de Tortosa-Besseit

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La orografía en la que se asienta este pintoresco pueblecito de la comarca del Bajo Ebro crea un laberinto de callejuelas empinadas que, en ocasiones, salvan grandes desniveles. Como curiosidad, muchas de las casas de Paüls cuentan con dos entradas situadas en pisos distintos. El pueblo se ubica entre las estribaciones de Els Ports de Tortosa-Beseit, en la cabecera del Barranco de las Fonts, afluente del Ebro. Trepa escalonado por la ladera de la colina del castillo, en el centro de un anfiteatro de montañas que superan, en algunos casos, los 1000 metros.

En la parte más alta de Paüls se halla la iglesia gótica de Santa María y los restos del castillo. En otro tiempo las calles eran empedradas. Hoy, las piedras han sido sustituidas por hormigón con rugosidades para evitar posibles caídas de peatones y animales y prevenir accidentes de vehículos. También el sentido práctico se impuso en la parroquia y se ha construido otra iglesia en el centro del pueblo, dedicada igualmente a Santa María. La visita a Paüls debe completarse con una excursión a la Ermita de Sant Roc, situada a unos 3 kilómetros, que está rodeada de un entorno natural magnífico con vegetación abundante, márgenes de piedra seca y una fuente de dieciséis caños.

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