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El Berrocal

Ortigosa del Monte, Segovia

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Si a la imaginación de Uderzo y Goscinny les hubiera dado por situar la resistente aldea de Astérix en España, El Berrocal de Ortigosa del Monte hubiera sido el paraíso de Obélix, que en vez de repartir menhires se hubiese dedicado a repartir estos inmensos bloques de granito entre sus vecinos. Por suerte, su doble nacionalidad, gala e imaginaria, nos permite, hoy en día, disfrutar del espectáculo de este paraje de bolos de piedra que no dejan a nadie indiferente. 
Sus agrupaciones son perfectas para jugar al escondite y sus formas, algunas muy caprichosas, son un ejercicio para echar imaginación y tratar de descubrir a qué nos recuerdan. Más allá de entretenimientos infantiles, el paisaje espectacular, compuesto por bosques de robles, fresnos o encina entre los que asoman las piedras, reconforta hasta el alma más turbada.
 

Contacto

Localización

40.839678, -4.186396