Fiesta de las Danzas del Diablo

Tijarafe, Santa Cruz de Tenerife

Llega la medianoche y se aproxima la llegada de Lucifer. Entre las sombras, el ser del más allá ha estado aguardando su momento durante todo un año para volver a dar la batalla entre el Bien y el Mal. Han pasado 365 días. Ahora, miles de asistentes esperan ansiosos su aparición en la fiesta de la Danza del Diablo de Tijarafe. Congregados en la plaza, al son de la música y rodeados de gigantes y cabezudos aguardan tan esperado momento, que es el éxtasis de la festividad. El diablo aparecerá por cualquier lugar, de improviso, y cuando se manifieste será imposible borrar de la mente su presencia. Un espectáculo musical y pirotécnico será el mejor acompañamiento que tenga la presencia del señor de las tinieblas en esta villa de La Palma. Con el fuego, su apariencia es incluso más aterradora. Antaño, el primer malvado se creaba con sacos y se remataba con una cabeza construida con latas de caramelos. Con el paso de los años, fue agrandando su poder y se hizo más espectacular. Declarada de interés cultural, la original celebración congrega a todo aquel que desee pasar una noche inolvidable. Allí, aunque el mal se apodere de las calles durante algunas horas, en el fondo sabemos que es un disfraz que oculta a las fuerzas del bien.