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Camprodón

Paisaje pirenaico con viejas notas de piano

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Famosa por sus galletas, longanizas y embutidos, en Camprodón los ríos y valles atraviesan una geografía donde la nieve cobra un papel protagonista. Llegamos a un paisaje pirenaico que vio nacer al pianista Isaac Albéniz. Es un municipio ideal para esquiar y para hacer senderismo mientras se disfruta de su naturaleza exuberante.

Castillos e interesantes iglesias integran el patrimonio arquitectónico de la villa. Casas modernistas, como Can Vila, Can Roig o Can Blanch nos recuerdan también la presencia de los primeros turistas barceloneses. Paralelamente, ferias, exposiciones y festivales han rejuvenecido su fisonomía, ligada para siempre a la artesanía en la elaboración de las galletas Birba, que aparecieron en 1893.

Entre muchos alicientes turísticos hay que destacar su impresionante casco antiguo, con el Monasterio de Sant Pere, las ruinas del Castillo de Creixenturri, el Ayuntamiento y la Iglesia de Santa María. Nos llevaremos la mejor de sus postales en el Pont Nou o Puente Nuevo, y también en los caminos que discurren por parques urbanos como el Paseo de la Font Nova o el Paseo Maristany.

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