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Oristà

Tras la huella del bandolero Perot Rocaguinarda

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Donde Osona se funde con las tierras del Lluçanès, en un paraje bellísimo, se encuentra este municipio barcelonés con un gran patrimonio arquitectónico de arte prerrománico y románico diseminado por el término municipal. Una de las joyas arquitectónicas más representativas es la cripta prerrománica del siglo X, situada en los bajos del templo parroquial de Oristà. La cripta está formada por tres naves, seis columnas y un pequeño altar con dos vitrales de alabastro.

En cuanto al arte románico, cabe mencionar las ermitas de Sant Nazarí de la Garriga (siglo XII), la de Sant Salvador de Serradellops y, en el núcleo de Oristà, la Ermita de Sant Sebastià. Una de las excursiones más habituales en el municipio es la que lleva hasta el Cingle dels Tres Còdols, un bello paraje situado cerca del Mas de Rocaguinarda, donde nació el famoso bandolero Perot Rocaguinarda. En un repecho de la roca se pueden contemplar grafitis del siglo XVIII realizados por los mismos bandoleros. De vuelta al pueblo de Oristá, con sus casas de piedra y calles estrechas, se debe visitar el Museo de Cerámica, con más de 4000 piezas de todos los tiempos, situado en el edificio de la Rectoría, junto a la iglesia parroquial.

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