Muchos destinos pueden hacernos sentir en la gloria, pero pocos nos hacen sentir en el cielo. Ódena, sin embargo, lo consigue. Esta pequeña población a una hora escasa de Barcelona cuenta con un aeródromo desde el que podemos despegar para contemplar a vista de pájaro un paisaje salpicado de viñas, cultivos de cereales, bosques y un monte muy especial: Montserrat, un macizo de formas redondeadas al que los vecinos de la zona han llegado incluso a atribuirle propiedades mágicas. ¿Y cómo podemos disfrutar de estas vistas? En globo, avioneta o ultraligero; dependiendo de nuestro valor y ganas de vivir experiencias nuevas.
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¿Qué ver?
Tras visitar el aeródromo de Igualada-Anòia, podemos aprovechar para ver ambas localidades, donde encontraremos una gran presencia de arquitectura renacentista. En Igualada, es imprescindible conocer la iglesia Sant Jaume Sesoliveres, de los siglos XII y XIII, y el claustro de la Escuela Pía, un antiguo convento del siglo XVII. En Igualada es especialmente recomendable acercarnos hasta los restos de su castillo, entre los que se encuentra una torre poligonal de once caras. Muy cerca de allí nos espera el pueblo de Espelt, con una antigua villa romana del siglo I a.C.
¿Qué comer?
Uno de los productos gastronómicos más interesantes de la zona son los “garbancitos de la Alta Anoia”, una variedad muy sabrosa y de excelente calidad que pueden prepararse en infinidad de recetas. En esta comarca además, se produce una miel excelente, gracias a la gran diversidad de flora en la zona y el clima, que colaboran para que así sea. Es interesante degustarla de una manera poco convencional, como por ejemplo, catando el vino de miel de Vallbona de l’Anoia. Si somos más tradicionales y queremos probarla en estado puro, las más recomendadas son las de Castellfollit, Piera, Els Prat de Rei o Vilanova del Camí. A media hora de Òdena, en Sant Sadurní d’Anoia, podemos comer en La Cava d’en Sergi, una buena opción para disfrutar de la cocina de temporada. Más cerca de Òdena, la masía restaurante Samuntà goza de una extensa carta de vinos, con más de setenta referencias.