Dentro de los quesos azules, el gorgonzola, quizá junto al stilton -que puede sustituirlo- es uno de los cremosos que mejor se comportan en salsas cocidas. Les va muy bien los boletos secos y las setas ayudan a darle un toque carnoso. Toma nota, aquí una receta de salsa gorgonzola muy sencilla.
Salsa de queso Gorgonzola
- 1/2 cucharadita de nuez moscada rallada o de macis
- 1/2 cucharadita de pimentón dulce
- 175 g de queso gorgonzola
- 200 g de setas: rebozuelos, gurumelos, boletos o champiñones Portobello
- 200 ml de nata para montar -35% MG mínimo-
- 2-3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 3-4 cucharadas de agua hirviente
PARA 4 PERSONAS
TIEMPO DE PREPARACIÓN: 5 minutos
TIEMPO DE COCCIÓN: 15 minutos

CÓMO HACER SALSA GORGONZOLA:
Limpiar las setas y cortarlas en trozos de 1/2 x 1/2 cm.
En un cazo calentar el aceite y sofreír las setas hasta que pierdan el agua y huelan bien. Salar muy ligeramente y perfumar con la nuez moscada o el macis y el pimentón, dar una vuelta y añadir la nata y 3-4 cucharadas de agua hirviente. Cuando haya roto el hervor, probar de sazón y añadir algo más si parece necesario.
Mientras, desmenuzar el queso y añadir al cazo de la salsa fuera del fuego.
VA BIEN PARA... carne a la parrilla, verduras recién hervidas en agua o al vapor, y pasta recién hervida.
NOTA: Los boletos frescos se pueden sustituir por 15 g de boletos secos y remojados 1/2 hora en la mínima cantidad de agua, que tienen un aroma intenso y exquisito. Utilizar el agua de remojo para la salsa y, si se quiere, un par de puñados de otras setas que darán el toque carnoso.