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Sant Andreu de la Barca

Casas modernistas en el Bajo Llobregat

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Este municipio del Bajo Llobregat conserva uno de los cascos antiguos más pródigos en modernismo de Cataluña, ya que Sant Andreu de la Barca fue un afamado pueblo de veraneo por su cercanía a Barcelona y su buen clima, rodeado de bosques y con vistas a toda la comarca. La Casa Ros Estrada, Can Jansana y, sobre todo, la Casa-Molí Pedemonte son ejemplos de la arquitectura de finales del siglo XIX y principios del XX. El campanario de piedra rojiza, planta octogonal y treinta metros de altura de la iglesia parroquial (siglo XVIII) domina el conjunto de la ciudad. Otras visitas imprescindibles son la Plaza de la Font de la Roda, centro neurálgico de la villa, y la Ermita de Santa Madrona, emplazada en un bonito paraje.

También en el centro se localizan varias masías históricas de los siglos XVI y XVII, recuerdo del pasado rural de la villa, como Ca l’Armangué, Can Archs y Can Preses. Para apreciar el conjunto del municipio se recomiendan las excursiones a la Creu de Sussalba y al Pi Tallat, desde donde se obtienen magníficas vistas del tramo final del río Llobregat y su entorno con la Montaña de Montserrat como telón de fondo.

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